Anillo de Pescador de Benedicto XVI será destruido
Así lo advirtió el portavoz del Vaticano, padre Federico Lombardi.
AFP
El anillo de Pescador, que se entrega en una ceremonia oficial al inicio del pontificado a todo Papa y emblema del apóstol Pedro, será destruido tras su renuncia el 28 de febrero, según explicó el martes el portavoz del Vaticano, padre Federico Lombardi. "Será destruido, probablemente despedazado", dijo.
El anillo, que se entrega al recién elegido pontífice en el curso de su entronización, tiene la imagen de San Pedro pescando en un bote y le tallan en latín el nombre del Papa que ocupa la sede en ese momento.
"Pero se trata de una situación inédita", explicó el religioso, quien aseguró que los expertos están estudiando el caso.
"Los objetos relacionados directamente con su misión petrina tienen que ser destruidos", agregó.
Por otra parte los obispos católicos cubanos calificaron este martes la renuncia del papa Benedicto XVI como "un valiente ejemplo de virtud", que los privará de "sus sabias enseñanzas". "La noticia, que ha sorprendido al mundo, nos embarga de pesar pues su renuncia nos priva de su presencia iluminadora y de sus sabias enseñanzas", señaló la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, en un comunicado publicado en su sitio web www.iglesiacubana.org.
"El Papa está dando un valiente ejemplo de virtud y serena confianza en los designios de la Providencia", agregó, junto con elogiar "la riqueza de su Pontificado".
El lunes, el arzobispo de La Habana, cardenal Jaime Ortega, consideró la renuncia del pontífice como "una invaluable lección de humildad" y de "valentía".
Benedicto XVI visitó la isla del 26 al 28 de marzo de 2012, ocasión en que pidió al gobierno comunista respetar las "libertades fundamentales" y condenó el embargo que impuso Estados Unidos a Cuba hace medio siglo.
Las relaciones Iglesia-Estado fueron difíciles tras la llegada de Fidel Castro al poder en 1959, pero mejoraron considerablemente a partir de la visita del papa Juan Pablo II a la isla, en 1998.
El anillo de Pescador, que se entrega en una ceremonia oficial al inicio del pontificado a todo Papa y emblema del apóstol Pedro, será destruido tras su renuncia el 28 de febrero, según explicó el martes el portavoz del Vaticano, padre Federico Lombardi. "Será destruido, probablemente despedazado", dijo.
El anillo, que se entrega al recién elegido pontífice en el curso de su entronización, tiene la imagen de San Pedro pescando en un bote y le tallan en latín el nombre del Papa que ocupa la sede en ese momento.
"Pero se trata de una situación inédita", explicó el religioso, quien aseguró que los expertos están estudiando el caso.
"Los objetos relacionados directamente con su misión petrina tienen que ser destruidos", agregó.
Por otra parte los obispos católicos cubanos calificaron este martes la renuncia del papa Benedicto XVI como "un valiente ejemplo de virtud", que los privará de "sus sabias enseñanzas". "La noticia, que ha sorprendido al mundo, nos embarga de pesar pues su renuncia nos priva de su presencia iluminadora y de sus sabias enseñanzas", señaló la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, en un comunicado publicado en su sitio web www.iglesiacubana.org.
"El Papa está dando un valiente ejemplo de virtud y serena confianza en los designios de la Providencia", agregó, junto con elogiar "la riqueza de su Pontificado".
El lunes, el arzobispo de La Habana, cardenal Jaime Ortega, consideró la renuncia del pontífice como "una invaluable lección de humildad" y de "valentía".
Benedicto XVI visitó la isla del 26 al 28 de marzo de 2012, ocasión en que pidió al gobierno comunista respetar las "libertades fundamentales" y condenó el embargo que impuso Estados Unidos a Cuba hace medio siglo.
Las relaciones Iglesia-Estado fueron difíciles tras la llegada de Fidel Castro al poder en 1959, pero mejoraron considerablemente a partir de la visita del papa Juan Pablo II a la isla, en 1998.