Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Este martes se llevará a cabo el boicot instigado por Eric Cantoná, el ex futbolista que alcanzó la cúspide en el Manchester United, en contra de los bancos franceses. Si la realidad se ajusta a los planes propuestos por Cantoná, el sistema bancario colapsará cuando millones de personas se dirijan a las sucursales a extraer sus ahorros. Entonces los ciudadanos podrán decir que dieron una lección a las instituciones que manejan de forma injusta —ese es el reclamo— el dinero de la gente.
Cantoná, un ex delantero de la selección francesa, potente, de buena pegada, gran liderazgo en la cancha, polémico y un símbolo del fútbol mundial, puso a circular en internet, a través de Youtube, un video en el que hacía oficial su invitación: “La revolución se hace en los bancos (...). En vez de salir a la calle a caminar kilómetros (para manifestarse), vas al banco de tu pueblo y retiras tu dinero”. Al final, se proponía al 7 de diciembre como el día indicado, dos meses después de la publicación del anuncio.
El video, traducido en múltiples idiomas, registra más de 300.000 visitas, pocas comparadas con las más de dos millones que registra otro de sus videos en internet, cuando en 1995 y jugando para el Manchester United, Cantoná agredió a un hincha con una patada voladora. No obstante, quizá lo más importante sea el movimiento que se tejió detrás de su llamado. En Facebook, el grupo “El 7 de diciembre, todos vamos a retirar nuestro dinero de los bancos” cuenta con cerca de 40.000 miembros y el portal www.Bankrun2010.com creado por dos artistas, Géraldine Feuillien y Yann Sarfati, ha extendido la idea desde Francia al Reino Unido y a Italia.
Los directores de los principales bancos, escépticos de que la jornada derive en un impacto considerable en el sistema bancario, tildaron a Cantoná de irresponsable. Un banquero que prefirió reservar su nombre aseguró: “Entre la simpatía que expresas en internet y el ir a la sucursal hay un abismo”. De otro lado, la ministra francesa de Economía, Christine Lagerde, pidió no hacer caso a las sugerencias del ex jugador y lo invitó a ocuparse de su trabajo: “Era un buen futbolista”.