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Activistas en favor de los derechos LGBT en Indonesia denunciaron la manera como doce mujeres trans fueron apresadas y, además, sometidas a ejercicios físicos y otras instrucciones con el fin de hacerlas más “masculinas”.
La denuncia se da la misma semana que el Parlamento nacional pretende pasar una ley que penalice la homosexualidad y criminalice todas las relaciones sexuales extramaritales. Lea también: Indonesia incluye a homosexuales en una guía de enfermedades mentales
Después de lo cometido contra estas doce mujeres trans, al norte de la provincia de Aceh, se produjo un éxodo esta semana de personas de la misma comunidad quienes huyen por temor a que la violencia siga escalando, dada la complicidad de las autoridades en los humillantes castigos.
Las doce mujeres fueron arrestadas el sábado en la noche, cuando la policía llegó junto con algunos lugareños y sacó este grupo de personas de algunos salones de belleza, obligándolas a quitarse la ropa y cortarse el cabello delante de los pobladores que acompañaban a los agentes.
Posteriormente, las mujeres fueron expuestas a una terapia de “reeducación de género” por parte de los mismos policías. Dicha instrucción consistió en hacerlas vestir como hombres, algunos ejercicios físicos, como flexiones de pecho y sentadillas, y ejercicios para hablar con una voz más grave. Lo hicieron hasta que los policías consideraron suficientemente “macho” a cada una.
Fuentes cercanas a los mujeres ultrajadas, asegura The Guardian, confirmaron que las mujeres también fueron golpeadas.
"Nos sentimos muy tristes y enojados cuando escuchamos sobre el arresto de estas mujeres y su trato inhumano", dijo un representante de una asociación LGBT en Aceh, quien pidió ocultar su nombre. "Después de eso, nos asustamos mucho porque pudimos imaginar que sucediera aquí", añade en conversación con el mismo medio inglés.
Una cadena de Whatsapp ha alertado en el país sobre una posible marcha que se realizaría este viernes en apoyo a la “erradicación de los LGBT”, lo que ha aumentado el temor de la población por posibles redadas. Lea también: Nueve de cada 10 personas en Indonesia consideran que la homosexualidad es una amenaza
El mensaje incluye a 50 grupos que estarían organizando estas protestas, entre los que se encuentra el notorio FPI (Frente de Defensores Islámicos), quienes se reunirían después de las oraciones del viernes en la Gran Mezquita Baiturrahman de Banda Aceh, capital de la provincia.
"Muchos de los salones se han cerrado debido a los rumores de que los fundamentalistas los atacarán después de las oraciones del viernes, por lo que cerraron temporalmente y evacuaron, y alrededor de 40 personas han huído hasta ahora", dijo Reza.
En mayo pasado, en la misma provincia, hombres homosexuales fueron azotados en público por el solo hecho de ser quienes son.
Existe una creciente intolerancia cobijada por las autoridades nacionales y locales. El odio ya ha invadido las redes sociales que cada vez más se plagan de grupos que dicen estar dispuestos a la “limpieza” LGBT.
Hartoyo, un hombre gay quien fue torturado por la policía en la misma región en 2007 y ahora es un activista que trabaja desde Yakarta, dice haber recibido varias amenazas de muerte, recoge el diario inglés.
La policía se ha vuelto un atacante de los derechos de la comunidad LGBT en toda Indonesia, en especial en provincias con fuerte influencias islámicas.
La provincia de Aceh es la única que ha adoptado como leyes los estatutos de la sharía, entre ellas, una que penaliza con 100 azotes a quien sea juzgado como homosexual.
La comunidad LGBT no se encuentra segura en este país del sudeste asiático. En 2017, según un informe de Human Rights Watch, la policía hizo redadas en hoteles, clubes y apartamentos arrestando a cerca de 300 personas LGBT.
Es un año preelectoral en Indonesia, por lo que hablar de la defensa de los derechos de esta comunidad podría significar un riesgo político para los candidatos presidenciales. Una reciente encuesta en este país demuestra que el 90% de los indonesios sienten “amenazada” su religión por la comunidad LGBT y las relaciones entre personas del mismo sexo. Lea también: Dos indonesios condenados a 85 bastonazos por relaciones homosexuales
Activistas del país se muestran preocupados por los avances legislativos a nivel nacional que quieren criminalizar a esta comunidad, por lo que se han recogido ya 35.000 firmas de una petición que exige al parlamento revisar estas leyes discriminatorias.
De manera optimista, Hartoyo asegura al The Guardian que “quizá este sea el primer paso para una revolución sexual, la inspiración para luchar. Quizá esto nos haga abrir los ojos”.