Aunque por sus apellidos Rodrigo Denardi Vicentini pareciese ser procedente de Italia, como lo mostró en el pasaporte con que entró a Rusia para asistir al mundial, Denardi es un brasilero con orden de arresto, desde hace dos años, por la Interpol. Gracias a su asistencia al partido entre la selección de su país natal y Costa Rica, el pasado 22 de junio, en San Petersburgo, las autoridades lograron capturarlo por su acreditación de la Fan ID.
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Esta credencial es esencial para poder ingresar a los estadios donde se desarrollarán los encuentros entre los equipos y cuenta con un chip requerido por las autoridades rusas durante todo el mundial. Por lo tanto, por acuerdo con la FIFA, quien porte la tarjeta de plástico se encuentra en la base de datos del Ministerio de Comunicaciones de Rusia que almacenará la información de los portadores hasta el 25 de julio.
La información que los asistentes debieron de proporcionar son nombre y apellido, nacionalidad, sexo, fecha de nacimiento, número de pasaporte (o documento de identidad), una fotografía a color reciente, dirección de contacto, número de teléfono y correo electrónico.
Por tal motivo, cuando el sistema divulgó la foto de Denardi a las autoridades internacionales, la Interpol lo identificó. Durante el partido de Brasil en San Petersburgo, en un operativo en conjunto con la policía rusa y brasileña, capturaron al sospechoso tras finalizar el partido en el que su selección quedó 2-0.
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La Interpol desde hace dos años buscaba al brasileño señalado por cargos de robo calificado y asociación criminal armada. Su condena le podrían valer 13 años de cárcel.
El caso de detención de Denardi en este mundial se convirtió en el primero en ser asistido por el sistema de tecnología de la credencial de la FIFA.
"El Fan ID permite realizar un control físico mucho más rápido porque nos basta con apuntar un láser para saber teóricamente todo sobre cada persona y evaluar el nivel de riesgo", explicó a BBC Mundo Nikolái Nikíforov, ministro de comunicaciones de Rusia.
Además, esta acreditación les da algunos beneficios a sus portadores como servicios de transporte gratuitos, descuentos en tiendas y restaurantes, tránsito por aduanas sin visados.
Este sistema se implementó por primera vez en este mundial en el que las mismas autoridades del país lo diseñaron para garantizar mayor seguridad a los asistentes de los partidos. Cualquier persona que ingrese a los estadios lo debe de portar, desde los operadores hasta los directivos de la FIFA y hasta el mismísimo Vladimir Putin, quien asistió al partido inaugural.
Por el momento, el único portador de la Fan ID que ha sido capturado gracias a la tecnología que usa este carné se encuentra retenido en Rusia mientras se tramita su extradición.
Por redacción internacional
