La muerte de Mohamed Merah, autor confeso de siete asesinatos en ocho días, abatido el jueves en un tiroteo con la policía de élite francesa (Raid) luego de un operativo de 32 meses, tendrá un gran impacto en las elecciones francesas que se desarrollarán el próximo 22 de abril, primera vuelta, y 4 de mayo, segunda. Merah, francés de origen argelino, de 23 años, murió "de una bala en la cabeza" al tratar de abrirse paso con una pistola Colt 45 hasta una ventana de la vivienda situada en un primer piso, por la cual llegó a saltar, indicó el fiscal de París, François Molins. Pero “cuando cayó, estaba muerto”, aseguró.
Este hecho, dicen especialistas, marcará la campaña electoral en la que el presidente, Nicolas Sarkozy, es candidato. Varias encuestas dadas a conocer el día de hoy daban al actual presidente obteniendo el primer lugar en la primera vuelta de las elecciones y perdiendo en la segunda frente a su rival socialista François Hollande. Algo que las encuestas reveladas la semana pasada no contemplaban. En ellas Hollande salía vencedor en ambas fechas.
Rompiendo también el silencio de esta formación política durante los últimos días, el presidente del Consejo General del Departamento de Essonne, Jérôme Guedj, fue el primer socialista en referirse al desenlace del drama de Toulouse al pedir a través de su cuenta Twitter la renuncia del Ministro del Interior, Claude Guéant a quien acusa de un "triple fiasco" en el manejo del caso que hoy conmociona la nación francesa.
De acuerdo con analistas, el presidente y candidato con su discurso de unidad nacional y justo a un mes de las elecciones, podría sacar ventaja de los temas de la unión y seguridad.
Según Guedj, los servicios de policía y de inteligencia francesa, de los cuales la oficina de Guéant es responsable, fallaron en el seguimiento previo de Merah, quien había estado involucrado en 25 investigaciones por delitos menores y denunciado por sus tendencias extremistas, en la investigación tras el primer crimen, que habría podido evitar el drama de la escuela judía y en la organización de la intervención de la policía, a la que romper el cerco de un hombre solo le tomó casi treinta horas tras las cuales no lograron detenerlo con vida.
En su blog, el experto militar Jean-Dominique Merchet, afirma que Merah se habría refugiado en el baño de sus apartamento luego de bloquear la entrada con una nevera y no se explica como al parecer no se usaron granada lacrimógenas o aturdidoras. Merchet señala además que en una operación mucho más compleja, como fue la recuperación de un airbus secuestrado en el aeropuerto de Marsella en 1994 “con cuatro terroristas armados hasta los dientes y decenas de pasajeros”, los comandos habían resuelto la toma quince minutos después del primer asalto.
Según las declaraciones de Guéant Merah murió cuando intentaba saltar por la ventana de su apartamento sosteniendo aún un arma en sus manos. Según la Fiscalía francesa, el asesino, que al parecer filmó sus crímenes con una cámara fotográfica, habría recibido un disparo de un francotirador de la policía antes de caer por la ventana.
Por Ricardo Abdahllah / París
