Un vuelo que partió de Tokio, capital de Japón, y aterrizó en Los Ángeles, Estados Unidos, ha captado la atención de los internautas, quienes han catalogado este trayecto como “un viaje en el tiempo”, pues el avión que despegó de la ciudad nipona en 2024, llegó a su destino en 2023.
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Se trata del vuelo NH106 de la asociación de aerolíneas Star Alliance, que partió de Tokio cuando el reloj marcaba las 12:50 de la madrugada del primer día de 2024 y que aterrizó en Los Ángeles, cuando eran las 5:50 p.m. del 31 de diciembre de 2023.
¿Por qué el vuelo “viajó en el tiempo”?
Los pasajeros, que celebraron dos veces la llegada del año nuevo, tuvieron la percepción de viajar en el tiempo, debido a los husos horarios, que es un “sistema que surge debido a que la Tierra gira sobre su eje de oeste a este, ocasionando que el sol ilumine una porción mientras deja la otra a oscuras, y se hace necesario un método para estandarizar el tiempo”, según lo establece la enciclopedia Concepto de la Editorial Etecé.
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Por tanto, al estar Tokio 17 horas por delante de la ciudad de California y al cruzar el océano Pacífico, en donde se encuentra la línea internacional de cambio de horario (una línea imaginaria en la superficie de la Tierra), delimitada entre la costa este de Asia y la costa oeste de Norteamérica, los pasajeros llegaron a su lugar de destino en la tarde del 31 de diciembre de 2023, tras haber salido a primera hora del día uno de 2024. Es decir que, los viajes aéreos que emprenden trayectos desde Asía hacia el continente americano, se retrasan un día, y aquellos que viajen en sentido contrario se adelantarán un día.
De acuerdo con FlightAware, una empresa de tecnología que proporciona datos de vuelos predictivos, históricos y en tiempo real, detalló que el vuelo NH106 tuvo una duración de nueve horas y 40 minutos, en los que el avión recorrió 1,117 kilómetros.
Respecto al avión en que se realizó el viaje, es un Boeing 787-9, o también conocido como “Dreamliner”, debido a un concurso mundial que la empresa productora, Boeign llevó a cabo en 2003. Esta aeronave comercial es de tamaño mediano y está diseñada para vuelos largos, ya que consume muy poco combustible. De acuerdo con la Royal Dutch Airlines, “este avión puede volar hasta 15.700 km, es incluso capaz de cubrir nuestras rutas más largas, como desde Nueva York a Bangkok”.
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