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¿La raza es un factor de peso en el proceso de admisión de estudiantes en la Universidad de Harvard? Sí. Y una jueza acaba de dictaminar que el prestigioso centro universitario hace lo correcto, al considerar la raza para admitir estudiantes.
Una gran victoria para el centro educativo, que desde 2014 enfrentaba una demanda por "discriminación positiva" o "acción afirmativa". El grupo Students for Fair Admissions (SFFA, Estudiantes por Admisiones Justas), dirigido por el activista blanco conservador Edward Blum llevó a juicio a la Universidad, respaldado por la admininistración del presidente, Donald Trump (Le puede interesar: ¿Por qué se dice que Donald Trump es racista?).
Lo que Blum señala es que la universidad de Harvard discrimina a los asiáticos. Durante años este hombre ha demandando todas las medidas (lo hizo antes contra la Universidad de Texas) que incluyen la raza como un factor de elección; También instigó el caso Shelby County vs. Holder que llegó a la Corte Suprema en 2013, utilizándolo para anular las disposiciones de verificación de la Ley del Derecho al Sufragio en un fallo que facilitó la prioridad republicana de discriminación en las urnas.
Su objetivo con las demandas sobre raza es buscar a lo largo y ancho del país demandantes que apoyen su causa para borrar de Estados Unidos la "acción afirmativa" o "discriminación positiva", que ha permitido que mujeres y grupos minoritarios tengan acceso a centros educativos y otros espacios históricamente vedados para ellos.
En octubre del año pasado el caso llegó a la Corte Federal de Distrito de Massachusetts, Boston. En la demanda, SFFA señala el carácter reaccionario y antidemocrático de la “acción afirmativa” o “discriminación positiva” que deja en desventaja a los grupos tradicionales. "Harvard discrimina a estudiantes de origen asiático", dice su argmentación, que respaldó con una queja de 120 páginas en las que muestra cómo la entrada a la prestigiosa universidad se hace con base en criterios de raza.
Ver más: El "mea culpa" de las Universidades de EE. UU.
De acuerdo con the Washington Post, Harvard ha mantenido una composición étnica de entre 40-50 por ciento blanca, 17-20 por ciento asiática, 7-10 por ciento hispánica, 7-10 por ciento afroamericana, diez por ciento extranjero residente y menos de 10 por ciento indígena americana, mixta o de etnicidad desconocida.
La denuncia demuestra que los aplicantes asiáticos son los más afectados por el sistema de cuotas raciales. A pesar de que la proporción de asiáticos en la población estadounidense se ha más que duplicado desde los años noventa, el porcentaje de asiáticos en las clases entrantes desde los años noventa se ha mantenido constantemente en torno al 17 por ciento, señala la demanda.
El fallo a favor de Harvard
Pero la magistrada federal Allison Dale Burroughs dijo que si bien el proceso de admisión de Harvard no es perfecto, era correcto, por ahora, al tener en cuenta la raza para formar un cuerpo estudiantil diverso.Ver más: El pasado esclavista que persigue a algunas universidades de EE. UU.
"La rica diversidad en Harvard y otros colegios y universidades y los beneficios que se derivan de esa diversidad fomentarán la tolerancia, la aceptación y la comprensión que finalmente harán que las admisiones con conciencia racial sean obsoletas", subrayó.
La Corte Suprema de los Estados Unidos falló en su contra en 2016, manteniendo la política de admisión de esa universidad sureña.
Harvard negó haber discriminado a los asiáticos, pero defendió el uso de criterios de selección más amplios que la excelencia académica, como la personalidad, al considerar a quién admitir.
La universidad señaló durante el juicio civil de tres semanas, realizado sin jurado en octubre pasado, que su proporción de estudiantes de origen asiático ha aumentado sustancialmente desde 2010.