La comunidad sigue utilizando palas y sus manos para intentar mover los escombros y llegar hasta los supervivientes o desaparecidos.
Foto: EFE - MOHAMUD OMER/IOM/ HANDOUT
Al menos 2.000 personas quedaron enterradas por un deslizamiento de tierra y rocas en la zona rural de Maip Mulitaka, a 600 kilómetros de la capital de Papúa Nueva Guinea (PNG). La llegada de equipos de rescate ha sido lenta debido a la remota ubicación, pero también por el peligro de un conflicto entre grupos tribales a lo largo de la única ruta existente para acceder a la zona de la catástrofe.
Por Juliana Castellanos Guevara
Periodista e internacionalista javeriana interesada en el análisis de temas de política internacional, ciencia y tecnología.ljcastellanos@elespectador.com