Los DD.HH. en Colombia truncan TLC con Europa
Según Rafael Palacios, director de la Agencia Asturiana de Cooperación al Desarrollo.
El Espectador
Los cinco millones de desplazados que hoy existen en Colombia, los llamados falsos positivos, la narcopolítica, las torturas, las detenciones arbitrarias y los ataques a comunidades campesinas e indígenas son, según Rafael Palacios, el director de la Agencia Asturiana de Cooperación al Desarrollo, las grandes falencias en materia de Derechos Humanos que impiden que la Unión Europea avance en la firma de un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Colombia.
Palacios se refirió al tema en Oviedo, España, durante un acto público en el que presentó a tres ciudadanos colombianos que obtuvieron el estatus de refugiados por el Principado de Asturias. Sus declaraciones se fundaron en las conclusiones de la VI Misión de Verificación de los Derechos Humanos en Colombia que la Agencia Asturiana llevó a cabo en diversas regiones entre el 29 de enero y el 12 de febrero.
El informe sostiene que cerca de 3.000 sindicalistas han sido asesinados en el país y casi 200 permanecen desaparecidos, un dato que coincide con las estadísticas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT): de cada 10 muertes de sindicalistas en el mundo, nueve se presentan en Colombia, un dato que también ha mantenido estática la aprobación del TLC con Estados Unidos.
De otro lado, varias ONG de las naciones andinas, entre ellas la Oficina Internacional de Derechos Humanos - Acción Colombia, se unieron para enviar una carta al comisario europeo de Comercio, el belga Karel de Gucht, para manifestar su preocupación frente a la inexistencia de mecanismos necesarios para bloquear la negociación del tratado —no sólo con Colombia sino también con Perú— en caso de que se registren nuevas vulneraciones a los Derechos Humanos.
Los cinco millones de desplazados que hoy existen en Colombia, los llamados falsos positivos, la narcopolítica, las torturas, las detenciones arbitrarias y los ataques a comunidades campesinas e indígenas son, según Rafael Palacios, el director de la Agencia Asturiana de Cooperación al Desarrollo, las grandes falencias en materia de Derechos Humanos que impiden que la Unión Europea avance en la firma de un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Colombia.
Palacios se refirió al tema en Oviedo, España, durante un acto público en el que presentó a tres ciudadanos colombianos que obtuvieron el estatus de refugiados por el Principado de Asturias. Sus declaraciones se fundaron en las conclusiones de la VI Misión de Verificación de los Derechos Humanos en Colombia que la Agencia Asturiana llevó a cabo en diversas regiones entre el 29 de enero y el 12 de febrero.
El informe sostiene que cerca de 3.000 sindicalistas han sido asesinados en el país y casi 200 permanecen desaparecidos, un dato que coincide con las estadísticas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT): de cada 10 muertes de sindicalistas en el mundo, nueve se presentan en Colombia, un dato que también ha mantenido estática la aprobación del TLC con Estados Unidos.
De otro lado, varias ONG de las naciones andinas, entre ellas la Oficina Internacional de Derechos Humanos - Acción Colombia, se unieron para enviar una carta al comisario europeo de Comercio, el belga Karel de Gucht, para manifestar su preocupación frente a la inexistencia de mecanismos necesarios para bloquear la negociación del tratado —no sólo con Colombia sino también con Perú— en caso de que se registren nuevas vulneraciones a los Derechos Humanos.