Los negocios del magnate de los medios de comunicación Rupert Murdoch en el Reino Unido estarían en riesgo, luego de que el Parlamento británico determinara que “Murdoch no es apto para dirigir una empresa” y “no está en condiciones de administrar una compañía internacional como el operador de televisión BSkyB”. La conclusión de los diputados británicos puede tener grandes consecuencias porque una de las condiciones que impone el ente regulador de las telecomunicaciones del Reino Unido, Ofcom, es precisamente que los administradores tengan las aptitudes para ejercer su labor.
Murdoch controla BSkyB con un paquete de cerca del 40% de las acciones y diez millones de clientes en el país. Está por verse si el dictamen del Parlamento va a obligar a News Corporation a abandonar la plataforma televisiva BSkyB, principal fuente de ingresos del grupo en el mercado británico. A esta conclusión llegó una investigación sobre el caso de las escuchas ilegales practicadas por el periódico News of the World, de propiedad de Murdoch, realizada durante los últimos nueve meses por la Comisión de Cultura, Medios de Comunicación y Deportes de la Cámara de los Comunes.
Según dicho informe, el poderoso magnate de la prensa se “hizo el de la vista gorda” sobre el escándalo de las interceptaciones ilegales en su dominical News of the World y “no es digno” de dirigir una compañía internacional. Agrega el documento que “Rupert Murdoch no tomó las medidas necesarias para informarse plenamente sobre las escuchas telefónicas y exhibió una ceguera deliberada sobre lo que ocurría en sus empresas y publicaciones. Concluimos, por tanto, que Rupert Murdoch no es una persona digna de dirigir una gran compañía internacional”.
La crisis del News of the World ya ha obligado a James Murdoch, hijo de Rupert Murdoch, a dimitir de la casi totalidad de sus cargos ejecutivos en la subsidiaria británica de News Corp. Con respecto a James, el informe señala que demostró “ignorancia deliberada” sobre lo ocurrido, lo que “suscita claramente preguntas de competencia”, agrega el texto. El redactor jefe de la sección de realeza del News of the World y un detective privado fueron condenados en 2007 a penas de cárcel por las escuchas, pero la extensión del escándalo no salió a la luz hasta que la policía abrió una nueva investigación en enero de 2011.
Las investigaciones se iniciaron a raíz del cierre del dominical, tras saberse que entre las personas espiadas estaba Milly Dowler, una joven que había desaparecido y que en esos momentos, en el año 2000, ya había sido asesinada. En las diversas investigaciones han comparecido periodistas, abogados, policías, personajes famosos y otras personas vinculadas o afectadas por el escándalo. El tabloide intervino ilegalmente durante años los teléfonos de cientos de personalidades británicas, incluidos los hijos del príncipe de Gales.
La comisión acusa a News International de haberla “engañado” acerca de las supuestas investigaciones internas. Le corresponderá ahora a la Cámara de los Comunes decidir si alguno de ellos cometió desacato y debe ser castigado por ello.