Un israelí herido es transportado en helicóptero militar tras resultar herido por un cohete disparado desde el sur del Líbano que impactó en la ciudad de Safed, en el norte de Israel.
Foto: EFE - AYAL MARGOLIN
El conflicto en Oriente Medio corre el riesgo de salirse mucho más de control. Aunque analistas consideran que ni Israel ni el grupo libanés Hezbolá buscan una guerra, se teme que un simple error de cálculo de cualquiera pueda desencadenar un enfrentamiento peor que el que libraron los dos bandos en 2006, según la agencia AP. Por eso los ataques del miércoles en la frontera entre Líbano e Israel pusieron en alerta a todos los mecanismos diplomáticos que intentan evitar a toda costa un desastre mayor.