Un escabroso crimen ha causado conmoción en Chile por su crudeza. Sebastián Balbontín, de 43 años, oriundo de uno de los suburbios de Santiago de Chile, confesó ante las autoridades de haber violado y asesinado a Almendra, su pequeña hijastra de tan solo 3 años por "celos".
En la audiencia de imputación, el sospechoso confesó que la razón por la que abusó y asesinó a la niña fue por envidia. Lo que explica mi actuar era que sentía celos de ella. Era lo que sentía en contra de Almendra, ya que era una niña sana a diferencia de mi hija”, indicó Balbontín, que de acuerdo con su testimonio tenía "capacidades diferentes" a las de Almendra.
De acuerdo a la declaración, el hombre subió con la niña a su cuarto a las 9.40 de la mañana del miércoles, pues la niña se habría orinado. En el primer piso de la casa estaba su esposa y madre de la niña junto con su hermano de ocho años. Balbontín indicó que llevó a la niña al baño, allí la desvistió y la llevó a la tina, instante en que habría ocurrido el abuso sexual, de acuerdo a las palabras del propio acusado.
Puede leer: En 2018, 3.014 mujeres han sido víctimas de violencia de género
De acuerdo con el relato reseñado por el diario La Tercera de Chile, una vez en el baño y ante el llanto de la menor, Balbontín habría hundido la cabeza de la niña en el agua en tres oportunidades y luego procedió a golpear a la menor.
“Comencé a pegarle golpes en el estómago y en el pecho. Le pegué en reiteradas ocasiones, lo que duró cerca de 15 minutos”, dijo.
Después de la golpiza, el hombre dejó a la niña acostada en una cama, “pero ella no reaccionaba”, afirmó el hombre en la declaración. Balbontín informó a la madre que Almendra no reaccionaba y la llevaron a un hospital donde ingresó sin signos vitales.
Le recomendamos: América Latina es la región más violenta del mundo contra las mujeres
Sin embargo, una vez avanzó la investigación de la muerte de la niña encontraron que la niña había sido fuertemente golpeada y que, además había sido abusada sexualmente. El sospechoso de inmediato fue su padrastro, pues fue el único que intervino con la niña antes de su muerte.
“Se le imputa ensañamiento por la cantidad de golpes en distintas zonas (…). Son hechos que dan cuenta de una manera de infringir un dolor innecesario que la han llevado a la muerte”, indicó el fiscal del caso, de acuerdo con La Tercera.
Ante la evidencia, la fiscalía determinó que Sebastián Balbontín será procesado por homicidio calificado y abuso sexual, por lo que decidió enviarlo a prisión de manera preventiva, mientras se da el juicio condenatorio.