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Según informó el ente de control, "el propósito de la alianza es brindar mayores herramientas en la labor de orientación que cumple la Entidad, y generar recomendaciones para los diferentes aliados distritales respecto a los derechos y deberes de los venezolanos refugiados y los migrantes más vulnerables".
Por su parte, Jozef Merkx, representante de la ONU en Colombia, indicó que el aumento de la cifra de migrantes implica trabajos interesantes con las instituciones que deben atenderlos y los migrantes, así como con las poblaciones que acogen a los migrantes ante los constantes casos de xenofobia que se dan.
En la ciudad, se creó una gerencia para la atención de los venezolanos con el fin de centrar la atención que se presta desde las diferentes instancias del Distrito, como los servicios de salud y educación. Esta instancia, dependiente de la Secretaría de Integración Social, fue la que se encargó de administrar el centro de refugiados que se creó para acoger a las personas que comenzaron a invadir predios aledaños a la Terminal del Salitre.
“El creciente ingreso de personas procedentes de Venezuela nos enfrenta a retos y oportunidades para fortalecer el trato digno, la convivencia respetuosa y libre de discriminación, con cero tolerancia a posibles manifestaciones de xenofobia. Nuestra tarea es empoderar a las personas en la exigibilidad de sus derechos y el reconocimiento de sus deberes, construyendo una Cultura de Paz”, concluyó la personera de la ciudad, Carmen Teresa Castañeda.