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"Me gusta la idea de alejarse para tener una mejor vista del conjunto", señaló en una rueda de prensa acompañada por los organizadores de un certamen que aborda distintas disciplinas artísticas con un enfoque de vanguardia que encaja con el espíritu de esta compositora, artista visual, multimedia e investigadora incansable.
A la vuelta de uno de esos viajes, a comienzos de los 80, la viuda de Lou Reed creó "United States", una performance de ocho horas que incorporaba números musicales, recitados, representaciones animadas, humor, política y poesía sobre la vida en Estados Unidos, lo que da una idea de lo complejas que pueden ser para ella las respuestas cuando le preguntan sobre la América de Trump.
"Siempre he creído que es mejor que los artistas no seamos muy directos con los temas políticos. Un lienzo azul enorme puede ser una mejor declaración política que una respuesta directa. Te puede inspirar libertad, apertura, ganas de hacer cosas", asegura.
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"No me gusta decir a la gente lo que debe pensar o decir", prosigue, "pero es cierto que los artistas estamos manteniendo conversaciones sobre si tenemos o no la obligación de abordar directamente la situación política, y cada vez la gente se siente más obligada porque es un desastre, un desastre absoluto".
En tiempos de fronteras rígidas, Anderson aboga por la idea de ciudades conectadas. "Ahora que las fronteras se están cerrando es más importante que nunca la cooperación entre ciudades, que son polos de artes visuales, música, danza.
Personalmente creo que tengo más en común con alguien de Madrid que de Florida", señala.
La semana de Laurie Anderson en Madrid incluirá la presentación, el día 15, de su instalación de realidad virtual "Chalkroom" en la Fundación Telefónica, donde impartirá dos charlas, el mismo 15 y el 16, y una retrospectiva en la Filmoteca, que el viernes 16 contará con su presencia en un coloquio tras la proyección de su obra "Home of the brave" (1986).
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Pero uno de los momentos más esperados es la representación que tendrá lugar mañana en el Museo Reina Sofía de la performance "The things we lost in the flood", basada en el libro homónimo que escribió en 2012, después de que el huracán Sandy inundara el sótano de su casa de Nueva York y arrasara con todos sus objetos, equipamientos artísticos y recuerdos.
"Se trataba de analizar qué pasa cuando pierdes cosas, como lo encajas, a veces es bueno perder ciertas cosas, como la timidez, a veces te da igual y a veces lo lamentas cada día de tu vida", reflexiona la artista, que en 2013 perdió a su marido.
"En Estados Unidos pensamos que nunca perderíamos la democracia y sin embargo ahora cada día vemos que no es tan estable", añade. "La idea a veces no es tanto la pérdida sino el cambio, todo cambia todo el rato".
Entre tanta pérdida, Anderson admite que también se llevó cosas positivas. "No intentes aferrarte a las cosas, porque las cosas se van. Eso es lo que me llevo, eso y no tener que volver a limpiar el sótano".