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En el desarrollo de la misión de verificación y acompañamiento a las comunidades que habitan las laderas del río Atrato, en los departamentos del Chocó y Antioquia, el defensor del Pueblo, Carlos Alfonso Negret, visitó este viernes el municipio de Bojayá, uno de los lugares en los que se vivió la guerra y que aún permanece en riesgo debido a la presencia de grupos armados en el territorio.
Durante su visita, Negret confirmó que “la situación no es fácil” y que “algunas de las situaciones que se vivían en esta zona del Atrato todavía se mantienen”. Además, advirtió, “el Estado debe reaccionar inmediatamente de la mano de la Armada, el Ejército y la Policía Nacional” ante las denuncias de las comunidades afrocolombianas, resguardos indígenas y población civil.
Alerta temprana para la cuenca del río Atrato (Chocó), especialmente para los municipios de Vigía del Fuerte y Bojayá. pic.twitter.com/BZbgVo02xP
— Defensoría del Pueblo (@DefensoriaCol) January 26, 2018
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En el casco urbano de Bojayá se reunieron el defensor del Pueblo, funcionarios del nivel de central, defensor regional del Chocó, autoridades militares, líderes y lideresas de la localidad, autoridad eclesiástica y el personero municipal con el fin de señalar estrategias y líneas de acción para combatir esta situación.
La misión de verificación y acompañamiento se lleva a cabo desde el 24 y hasta el 31 de enero. Su objetivo es establecer un diálogo directo con los principales líderes sociales de las comunidades que han sido víctimas del conflicto armado y que, aún después de firmado el Acuerdo de Paz, continúan viviendo una crisis humanitaria.
Negret hace su recorrido acompañado de la delegada para los Derechos de la Población Desplazada, el delegado para los Derechos de los Indígenas y Minorías Étnicas, los defensores Regionales del Chocó y de Urabá y los equipos de terreno. La ruta pasa por Beté - Medio Atrato, Vigía del Fuerte, Pueblo Nuevo, Antigua Bojayá, Murindó, Carmen del Darién, Riosucio, Belén de Bajirá, Unguía y Apartado.
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Según la Defensoría, esta sería la primera vez que un funcionario de esta índole “llega a un territorio claramente amenazado por diferentes actores y circunstancias”. “El Estado tiene una deuda con el Chocó. Desde la Defensoría llevaremos al Gobierno estas necesidades para que sean atendidas”, indicó Negret.