Publicidad

La tragedia textil de Bangladesh

El derrumbe de un complejo textil en Bangladesh el pasado 24 de abril, considerado la mayor tragedia industrial en la historia de esa nación, sigue cobrando vidas.

Redacción Internacional
09 de mayo de 2013 - 09:57 p. m.

El último reporte indica que la cifra asciende a 947. Y mientras los cuerpos de rescate trabajan día y noche para seguir sacando cadáveres de los escombros del Rana Plaza, otros episodios alimentan la tragedia de este empobrecido país del sudeste asiático, cuya maltrecha economía depende en buena parte de los ingresos del área textil. Ayer murieron al menos otras ocho personas en el incendio de un taller de confección. Los hechos le recuerdan al mundo las penosas condiciones laborales de los lugares donde se hacen las prendas de las grandes marcas.

El incendio ocurrió en la tercera planta de un edificio de once pisos que alberga dos talleres de confección, en el barrio de Darussalam de la capital, Dacca. Las víctimas murieron por asfixia, atrapadas en una escalera, por el “humo tóxico emitido por ropa acrílica”, según el director operativo de los bomberos, Mahbubur Rahman.

Bangladesh es el segundo productor de ropa en el mundo, debido a los bajos salarios y la mano de obra, que está entre las más baratas del mundo. El sector textil le representa US$29.000 millones anuales a la economía bangladesí y el año pasado fue el 80% de las exportaciones del país. Sin embargo, las ganancias no se ven reflejadas en el desarrollo industrial: las fábricas están ubicadas en edificios viejos y no cumplen con normas de seguridad, las redes eléctricas son precarias y los incendios son frecuentes en los 4.500 talleres de confección del país. Las grandes marcas occidentales han criticado las condiciones de los trabajadores y han amenazado con buscar otros mercados, pero hasta ahora siguen comprando.

En vista del drama que el derrumbamiento del Rana Plaza sacó a la luz, Naciones Unidas pidió a las marcas mundiales de ropa que colaboren con las organizaciones internacionales y otros sectores para mejorar las condiciones de trabajo. “Las firmas internacionales que producen en Bangladesh tienen la responsabilidad de proteger los derechos humanos” de sus trabajadores, dijo Pavel Sulyandziga, que dirige actualmente uno de los grupos de trabajo de la ONU sobre los derechos laborales y humanos.

Por Redacción Internacional

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar