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La tensión en Nicaragua no cesa. La reforma del sistema de pensiones que impulsaba Daniel Ortega detonó una ola de violentas protestas, saqueos y choques con la policía que han dejado al menos 25 muertos en el país. Pese a retractarse en la política impulsada, el mandatario nicaragüense continúa con la presión por parte del movimiento estudiantil que insiste en no cesar con las manifestaciones en contra del gobierno.
El domingo, Ortega buscó aplacar la furia de las calles revocando los aumentos en las contribuciones obreras y patronales al fondo de pensiones que administra el Instituto Nicaragüense del Seguro Social (INSS). Esos incrementos fueron la chispa que encendió las protestas iniciadas el pasado miércoles por un grupo de estudiantes, que rápidamente se extendió a otros sectores de la sociedad.
Además de los estudiantes, el Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP), que ha sido aliado de Ortega en sus 11 años en el poder, mantuvo la convocatoria a una marcha contra el gobierno para este lunes. La reforma había sido una recomendación del Fondo Monetario Internacional (FMI) para rescatar la estabilidad del quebrado sistema de pensiones de Nicaragua.
"Las protestas ya no son solo por el INSS, es contra un gobierno que nos niega libertad de expresión, libertad de prensa y de manifestarnos pacíficamente", declaró a la AFP Clifford Ramírez, un estudiante de Ciencias Políticas de 26 años que participó en el inicio de las marchas.
El escritor nicaragüense Sergio Ramírez, se pronunció hoy sobre los hechos y dedicó su Premio Cervantes, conseguido este lunes, a sus compatriotas asesinados en las protestas. “A la memora de los nicaragüenses que en los últimos días han sido asesinados en las calles por reclamar justicia y democracia”, declaró Ramírez.
Sobre su incursión en la política Ramírez señaló que “si un día me aparté de la literatura para entrar en la vorágine de una revolución que derrocó a una dictadura es porque seguía siendo el niño que se imagina de rodillas en el suelo de la venta presenciando la función de títeres del retablo de Maese Pedro, ansioso de coger un mandoble para ayudar a don Quijote a descabezar malvados”.
En contexto: Sergio Ramírez recibe el Premio Cervantes de manos de Felipe V
El ganador del máximo galardón de las letras en español participó el domingo en Madrid de una concentración en la Puerta del Sol para reclamar el fin de la “represión insostenible” que se está viviendo en Nicaragua. El Premio Cervantes explicó que acudió para solidarizarse con su pueblo, quien en sus palabras ha tenido “la valentía suficiente para protestar para que le devuelvan la libertad y democracia confiscadas”.
Se prevé que las marchas y manifestaciones continúen hoy en Nicaragua, pues la revocatoria a la reforma de pensiones no convenció a algunos estudiantes. “No queremos la política sandinista orteguista”, afirmó uno de los universitarios a la agencia EFE. Los policías antidisturbios se mantienen desplegados en varias ciudades para controlar los actos de vandalismo y enfrentamientos.
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