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La ciudad estadounidense de Kenosha, en Wisconsin, fue escenario de protestas luego de que un policía disparara varias veces el domingo a un hombre afrodescendiente por la espalda, a poca distancia y mientras se subía a un vehículo, según un video del hecho. Se trata de Jacob Blake, quien fue llevado a un hospital en Milwaukee en estado crítico. El hecho no es de poca monta, teniendo en cuenta que apenas en mayo la muerte de George Floyd desató unas de las manifestaciones antiracistas más importantes en la historia del país.
“Esta noche, Jacob Blake recibió múltiples disparos en la espalda, a plena luz del día, en Kenosha, Wisconsin”, tuiteó el gobernador de Wisconsin, Tony Evers. ”Aunque aún no tenemos todos los detalles, sabemos con claridad que no es el primer hombre o persona negra en recibir disparos o heridas o en ser asesinado sin piedad a manos de miembros de las fuerzas del orden en nuestro estado o nuestro país”, siguió.
La policía dijo que el tiroteo ocurrió cuando respondían a un incidente doméstico, alrededor de las cinco de la tarde. Un video del incidente grabado desde un teléfono móvil muestra cómo un hombre negro es seguido por dos policías con armas, mientras intenta subirse al frente de una camioneta gris.
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Cuando abre la puerta e intenta llegar al asiento del conductor, uno de los oficiales le toma por la camiseta y aparentemente le dispara varias veces por la espalda.
El abogado de derechos civiles Ben Crump dijo que los tres hijos de Blake estaban en la camioneta cuando todo ocurrió y que el hombre había intentado intervenir en una pelea entre dos mujeres. ”Vieron a un policía disparar a su padre. Estarán traumatizados para siempre”, escribió Crump en Twitter.
Crump también representa a la familia de George Floyd, un afroestadounidense que murió el pasado 25 de mayo a manos de un policía blanco, que se arrodilló sobre su cuello por casi nueve minutos.
Tras anochecer en Kenosha, una multitud de manifestantes se enfrentó a policías antidisturbios, según imágenes publicadas por el diario Milwaukee Journal Sentinel.
La ciudad declaró luego un toque de queda nocturno. El departamento de Justicia de Wisconsin dijo que su división de investigación criminal está investigando lo ocurrido. ”Los oficiales involucrados han recibido una baja administrativa”, informó el departamento en un comunicado el lunes temprano.