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Daniel Rendón Herrera, alias ‘Don Mario’, está a punto de convertirse en el primer jefe paramilitar en ser excluido del programa de Justicia y Paz. La Fiscalía solicitó que se le excluyera, porque después de desmovilizarse en 2005 siguió delinquiendo hasta que lo capturaron en 2009. La última palabra está en manos de magistrados de Justicia y Paz, que decidirán si le retiran al capo sus beneficios jurídicos, entre ellos, la pena alternativa de ocho años de prisión, por los delitos que cometió en su paso por los paramilitares.
De acuerdo con la Fiscalía hay pruebas de que ‘Don Mario’, desmovilizado a mediados de 2005 con el Bloque Centauros de las Autodefensas, a pesar de haberse sometido a la justicia, siguió delinquiendo. De hecho, habría evidencias de que a los cinco días de haberse desmovilizado volvió a la criminalidad, al fundar una de la estructura delincuencial más grande del país: la banda criminal Los Urabeños, hoy comandada por el hombre más buscado del momento: Dairo Antonio Usuga David, alias ‘Otoniel’. ‘Don Mario’ siempre ha negado sus vínculos con esta estructura.
Además, de acuerdo con la Fiscalía, hay pruebas de que el delincuente quiso aprovecharse de la desmovilización de las Autodefensas para copar los espacios que dejaron sus excompañeros y el negocio del narcotráfico. Las investigaciones al respecto continúan. Después de desmovilizarse, ‘Don Mario’, hermano de otro jefe paramilitar, Freddy Rendón Herrera, alias ‘El Alemán’, estuvo en libertad hasta el 15 de abril de 2009 cuando fue capturado en zona rural de Necoclí (Antioquia) y así se dio final a una carrera delictiva de 22 años. Don Mario se inició en la criminalidad en 1987 y de la mano de los hermanos Castaño, oriundos de Amalfi (Antioquia), el mismo pueblo donde el capo nació en 1966.
El paramilitar Miguel Arroyave, alias ‘Arcángel’, asesinado en 2004, fue otro de sus socios, con quien viajó en 1996 a los Llanos Orientales y libró una guerra a sangre y fuego contra las Autodefensas Campesinas de Casanare, que lideraba Héctor Buitrago, alias ‘Martín Llanos’. Durante el conflicto, ‘Don Mario’ se convirtió en el jefe de finanzas del Bloque Centauros de las Autodefensas, que comandaba Arroyave, y con el que se desmovilizó a mediados de 2005.
La guerra en los Llanos dejó, de acuerdo con las autoridades, cerca de 2 mil muertos y fue en ella que ‘Don Mario’ y sus hombres iniciaron lo que sería el germen de la banda criminal Los Urabeños. Esta organización fue la herramienta con la que el capo se apoderó del espacio dejado por sus compañeros que, a diferencia suya, se sometieron a la justicia y fueron encarcelados. En su proyecto de convertirse en el jefe de jefes del paramilitarismo se fue para Urabá, donde finalmente fue capturado.
Ahora está ad portas de una nueva derrota. Su abogado dice que ‘Don Mario’ ha colaborado con la justicia y ha devuelto bienes avaluados en US $23 millones. Magistrados de Justicia y Paz son los de la última palabra. En sus manos está el futuro de este capo.