La CIDH condena la masacre del Tarra

El casco urbano de El Tarra, Norte de Santander, en el 2016. / EFE

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó la muerte violenta de nueve personas en el municipio de El Tarra (Norte de Santander), masacre que tuvo lugar el pasado 30 de julio cuando un grupo de hombres armados irrumpió con disparos en un establecimiento comercial. 

Tanto el Gobierno como la Defensoría del Pueblo manifestaron su rechazo contra estos hechos de violencia y confirmaron que ya se creó un grupo élite para la identificación de los responsables y el esclarecimiento del episodio que acabó con la vida de nueve personas a plena luz del día.  “Estos graves hechos de violencia deben ser investigados prontamente y de manera exhaustiva a fin de sancionar a los responsables y que no queden en la impunidad”, señaló el Relator para Colombia y para las personas defensoras de derechos humanos de la CIDH, Francisco Eguiguren. 

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Las investigaciones aún continúan. Hasta el momento, dentro de las víctimas que ya han sido identificadas se encuentran Frederman Quintero, presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda, y dos excombatientes desmovilizados de las Farc. También se encontraron algunos cuerpos de presuntos raspadores de hoja de coca que formarían parte de programas de sustitución de los cultivos ilícitos, un transeúnte y una mujer que trabajaba en el establecimiento. 

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La CIDH prendió su alarma ante los hechos y enfatizó la gravedad de los asesinatos y amenazas a líderes sociales y comunales en la zona. “La Comisión recuerda que la labor de las personas defensoras de derechos humanos es esencial para el fortalecimiento de las sociedades democráticas”, señaló la CIDH, en un comunicado. 

Finamente, la organización señaló la situación que se vive en esta región por los continuos enfrentamientos de diversos grupos armados. Hechos que han generado el desplazamiento de la población hacia las zonas de Ocaña y la ciudad de Cúcuta. Asimismo, fue reportado por la Comisión que en los municipios vecinos de Teorama y Hacarí, desde hace 15 días, decenas de menores de edad no asisten a sus escuelas por combates entre las guerrillas

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