Reubican peajes que generaron protestas en el Urabá

Comité de Iniciativa Ciudadana

Hace unas semanas una ola de protestas estalló en la zona bananera del Urabá antioqueño, especialmente en los municipios de Chigorodó, Apartadó y Turbo, por la ubicación de tres peajes seguidos en la región. La objeción de los habitantes frente a los peajes condujo a una solución concertada entre la gobernación de Antioquia, la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI)y el Ministerio de Transporte.

La propuesta es fusionar y trasladar las casetas de Chaparral y Río Grande al sitio conocido como El Tigre (en inmediaciones de Chigorodó). Sin embargo, el cobro del peaje Cirilo, reanudará pues para los alcaldes reconocen que los peajes son necesarios para el progreso de Urabá.

“Eso tiene unos costos que estarían cercanos a los 100 mil millones de pesos en los próximos 10 años”, dice el gobernador de Antioquia, Luis Pérez.  

“Hemos hablado con los alcaldes de Chigorodó Carepa, Turbo y Apartadó, y les hemos pedido que de esos 100 mil millones de pesos que le entran a la región de Urabá, nuevos, ellos coloquen 3000 millones de pesos, entre todos, en 10 años. Nosotros, en la gobernación de Antioquia entramos en conversaciones con el Gobierno nacional y el Ministerio de Transporte para buscar la manera de cubrir lo que queda restando” dijo el mandatario.

Los manifestantes argüían que estos tres peajes eran insostenibles para la economía de los habitantes de la zona. Más de 60.000 personas de los cinco municipios aledaños a los peajes se mueven a diario entre un lugar y otro.

Hasta el momento la operación de las tres casetas de peajes está suspendida por orden de la ANI en días atrás, pues esta fue la manera de mediar las protestas y dar espacio a las insituciones para buscar una solución. Ante la solución de este lunes, Dimitri Zaninovich, presidente de la ANI, aseguró que aún no hay fecha exacta para inicar los cobros de peajes.