Son cinco las personas secuestradas en el Catatumbo

Además de los cuatro hombres que fueron retenidos en Teorama, se sumó Yurgen Amaya, un joven de San Calixto que había sido secuestrado el sábado pasado. Líderes de la región temen que sean obligados a desplazarse por las constantes amenazas.

redacción Nacional
03 de abril de 2018 - 04:03 p. m.
Centro: Leonardo Pallares. De izquierda a derecha: Ronald Montejo, Yulbreider Pallares Baene, Arturo Baene y Yurgen Amaya. / Fotos: Facebook
Centro: Leonardo Pallares. De izquierda a derecha: Ronald Montejo, Yulbreider Pallares Baene, Arturo Baene y Yurgen Amaya. / Fotos: Facebook

La situación en Catatumbo cada día es más crítica. Luego de que se conociera que cuatro hombres, entre ellos un reconocido líder social, fueran secuestrados el pasado lunes a las 5:00 de la tarde en el casco urbano de Teorama (Norte de Santander), se conoció que dos días antes había sido retenido otro joven en zona rural del municipio de San Calixto. Se trata de Yurgen Amaya, quien el sábado 31 de marzo fue abordado por, al parecer, miembros del Eln.

(Vea: Triple secuestro en Teorama, Norte de Santander)

La información que recibieron en un principio las autoridades es que Yurgen Amaya fue secuestrado cuando se dirigía junto a su esposa e hija de un año al casco urbano de San Calixto (Norte de Santander). Fueron retenidos por hombres armados al parecer del Eln en la vereda Lagunitas, a 40 minutos del pueblo. Yurgen, según las autoridades, se lo llevaron amarrado. Hasta el momento se desconoce su paradero.

El secuestro de Yurgen Armaya fue el inicio de lo que sucedió este lunes 2 de abril en Teorama.  Según los habitantes del municipio, a las 5:00 de la tarde llegó un grupo de hombres armados con brazaletes del Eln en una camioneta al casco urbano. Al llegar al centro de Teorama, los armados intimidaron a Arturo Baene, un reconocido líder social del Movimiento por la Constituyente Popular (MCP), exsecretario de Hacienda municipal y excandidato a la alcaldía de esta localidad del Catatumbo en 2015. Fue el primer secuestrado.

El segundo en ser retenido fue su primo Yulbreider Pallares Baene. La camioneta siguió su recorrido y llegó al barrio Carretero. Ahí fue obligado a subirse al vehículo Leonardo Pallares, un reconocido joven que trabaja como conductor de volqueta. Y el último en ser secuestrado fue Ronald Montejo, hijo de una vendedora de mercado del pueblo y quien vive en el barrio Belén, vía a San Calixto. Los habitantes del pueblo y las autoridades desconocen el paradero de estas cuatro personas.

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El secretario de gobierno de Teorama, Ciro Omeara Jácome, sostuvo que los cuatro secuestrados son personas que anda tienen que ver con grupos al margen de la ley, e hizo un llamado a la guerrilla del Eln para que les respeten la vida y los liberen prontamente.  “No habíamos tenido presencia de esa manera, fue una situación que nos tomó de sorpresa y nos tiene alarmados, no sabemos las razones, sabemos que son jóvenes trabajadores, uno de ellos tiene una finca, un bus de línea, otro tiene una volqueta, otro le ayuda a su mamá en un restaurante en la venta de comidas y otro tiene una finca”, le dijo Jesús Montagut, alcalde de Teorama, a RCN Radio.

Las autoridades temen que la situación de seguridad en el Catatumbo se agudice, pues desde que se hizo pública la guerra que libran el Eln y los Pelusos -una disidencia del Epl- por el control de los cultivos de coca y las rutas del narcotráfico en la región a mediados de marzo, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA) dio a conocer que los enfrentamientos han afectado a más de 20.000 personas. Las poblaciones de San Calixto, El Carmen, Hacarí, Sardinata, Teorama, El Tarra y Convención son las más afectadas por estaos nuevos enfrentamientos.

Es más, las autoridades locales y nacionales advirtieron que se prevé un desplazamiento masivo de líderes sociales y defensores de derechos humanos del Catatumbo ante la falta de garantías de seguridad. “Tenemos tres peticiones básicas. La primera es que le respeten la vida nuestros compañeros y líderes sociales secuestrados, independientemente de quien sea el actor armado. Segundo, que se dé un cese al fuego bilateral, pues el Estado es responsable de lo que está sucediendo. Y tercero, que la iglesia sea un intermediario, porque son los únicos que pueden entrar a pacificar y permitir un diálogo entre las partes para evitar que la historia se repita”, sostuvo Darwin Hacarí, líder social de Teorama.

(Para más información: Asesinan a otro líder social en el Catatumbo)

Además, señaló que se trata de una guerra que los tomó por sorpresa, pues se estaban preparando para el tránsito a la paz. El líder social indicó que si no existen garantías de seguridad para que las juntas de acción comunal hagan su trabajo, qué se puede esperar: Estamos en un aguerra donde nos vamos a volver trofeos. Nosotros siempre hemos estado solos. Por eso queremos que el Eln y el Epl nos digan por qué está pasando esto, qué quieren que cambiemos y qué tenemos que hacer para solucionarlo. Pero nosotros no podemos ir hasta donde ellos. Necesitamos la ayuda del Estado y la Iglesia”, agregó Hacarí.

Los líderes sociales del Catatumbo activaron un plan de contingencia para resguardarse y velar entre ellos mismos, por ahora, por su seguridad. De no existir una respuesta institucional que vele por sus garantías, se verán obligados a desplazarse, como ya ha ocurrido con miles de pobladores de distintos municipios de la región. “A nosotros no nos pagan por lo que hacemos. Es pura convicción”, concluyó Darwin.

Por redacción Nacional

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