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Los intentos por reformar el sistema judicial en Colombia no son recientes. Desde hace décadas, los distintos gobiernos, comenzando por el del propio Alfonso López Michelsen hasta el actual, con el presidente Juan Manuel Santos, han tramitado innumerables iniciativas dirigidas a ese objetivo. Pero, al final, no ha derivado en cambios estructurales para devolverles a los ciudadanos la confianza en la que, en algún momento, fue la rama del poder público más respetada en el país.
Y durante esos años, se han dado distintas coyunturas que motivan esa intención. Por ejemplo, en 2010, recién posesionado Santos durante su primer mandato, este prometió restablecer las relaciones con la Rama Judicial, descongestionar el sistema y, especialmente, garantizarles a los ciudadanos el acceso a la justicia. Una promesa que, un año después, llegó al Congreso de la República con un Acto Legislativo que no contó con el aval de las altas cortes. El resultado final, tras varias discusiones y lamentables episodios, como se sabe, fue el de la decisión que adoptó el jefe de Estado de objetar la norma y anunciar su paso a mejor vida.
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Para no ir más lejos, en 2015 el reelegido gobierno de Juan Manuel Santos radicó una nueva propuesta incluida en la denominada Reforma al Equilibrio de Poderes y, contra todo pronóstico, el proyecto salió avante con asuntos clave como la eliminación de la cuestionada Comisión de Acusación, la creación de un Tribunal de Aforados en su reemplazo; la eliminación del Consejo Superior de la Judicatura y otros tantos elementos que terminaron quedando sepultados cuando la Corte Constitucional entró a estudiar la citada reforma.
Por eso, tras luego de varios intentos, no es nuevo que, ante la expectativa de la elección del nuevo Congreso y los comicios presidenciales, los candidatos a esa corporación como a la Casa de Nariño hablen de la necesidad de una reforma a la justicia. Asamblea Nacional Constituyente, reforzar la tecnología para mejorar el sistema y otras propuestas, de hecho, fueron objeto de debate este jueves, durante el foro de candidatos al Legislativo organizado por El Espectador, Caracol Televisión y la Universidad de los Andes, que tuvo lugar en esa institución educativa.
¿Qué proponen?
La cabeza de lista al Senado por el Partido Liberal, Mauricio Gómez Amín, anunció que buscará resucitar en el Congreso la propuesta de eliminar la Comisión de Acusación -cuyo historial evidencia que tiene más procesos archivados que juzgados-, y revivir la Comisión de Aforados en su reemplazo. Así mismo, habló de una Asamblea Nacional Constituyente limitada para reformar al sistema. “Los colombianos perdieron la confianza en la justicia y, por eso, se hace necesaria una constituyente para reformar la justicia. Estamos en crisis. Hay que reforma la justicia ya y procurar elegir jueces y fiscales transparentes”, señaló.Por su parte, el número 2 de la lista al Senado por el Partido Conservador, el actual representante David Barguil, habló de la necesidad de revisar los incentivos que están teniendo los más grandes criminales del país e hizo alusión, por ejemplo, a la forma en la que el Estado les permitió a los exintegrantes de las Farc participar en política. “Ver que un delincuente de cuello blanco tiene beneficios, le choca al ciudadano. Bienvenidos los beneficios luego de un proceso de paz, pero la primera tarea era reparar a las víctimas. Pero verlos hoy de vedet es ofensivo y genera un incentivo perverso que despierta desconfianza en la justicia”, añadió el legislador cordobés. Sin embargo, desde su perspectiva, también se debe invertir en tecnología para mejorar el acceso a la justicia.
La representante Angélica Lozano, aspirante de la Alianza Verde al Senado con el 10, dijo que es fundamental pensar en una reforma a largo plazo, que supere los cuatro años de mandato presidencial e, incluso, el mismo periodo legislativo, y fue muy crítica frente al resultado que tuvo la Reforma al Equilibrio de Poderes en su paso por la Corte Constitucional. “Hay que perseverar, pero sobre ellos (los magistrados) hay que poner el reflector. Se necesita responsabilidad de allá” sentenció Lozano.
Finalmente, el senador del Centro Democrático Alfredo Rangel, quien aspira a reelegirse en marzo, anunció tres propuestas que llevará su partido: incrementar el pie de fuerza de la Policía para que haga mayor presencia en las ciudades, organizar a la ciudadanía en frentes de seguridad y redes de informantes para que cooperen de manera voluntaria, pacífica y no armada, y reformar el Código Penal pues, desde su perspectiva, “es demasiado garantista para los delincuentes en detrimento de los derechos de las víctimas”.