Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.

Aguanta, James, aguanta

Antonio Casale

17 de abril de 2016 - 09:00 p. m.

El amor que le tenemos a James nos nubla la razón, pero su situación no es tan mala como la pintan. Es evidente que no tiene cupo en el equipo estelar, pero no es porque lo esté haciendo mal, o porque Zidane lo odie, o porque un sector de la prensa española se la tenga montada.

PUBLICIDAD

Desde la conformación de su nómina, en la que poco han tenido que ver sus entrenadores recientes porque las contrataciones pasan por lo que puedan representar en términos de mercadeo para Florentino Pérez más que en lo que puedan aportar a un colectivo, el Real no tiene equilibrio. Es un equipo que cuenta con buenos atacantes pero no tiene quién recupere el balón en la mitad, tampoco quien lo administre, por eso se ve partido permanentemente.

Hay dos maneras de solucionar el problema. La primera es utilizando en la mitad a Modric, Kross y James con labores administrativas, exigiéndoles que no siempre se debe buscar verticalidad, porque una manera de defenderse es teniendo el balón. Pero Zidane lo intenta con la segunda opción, poniendo a un volante con funciones netas de marca como lo Casemiro, aunque el brasileño no es ni la mitad de lo que en tiempos de Ancelotti fue Xabi. Lo cierto es que por ahora a Zidane le funciona su estrategia en términos de resultados. Sin embargo, su equipo no produce confianza.

Es verdad, tener a un jugador de las características de James en el banco es un desperdicio. Sin embargo, no se puede decir que Casemiro le quitó el puesto, porque son dos hombres de características diferentes. En esas condiciones, Zidane tenía que sacrificar a uno de los jugadores de corte ofensivo. En ataque Bale, Benzema y Cristiano, por logros, son más que James, ya tienen una Champions en su sala de trofeos. En el medio el menos equilibrado entre Modric, Kross y James es este último. Ahora, en los pies de James se ha puesto una esperanza no menor: la de remontar la liga, que no es poca cosa. Allí juega y cumple con creces.

Read more!

James es joven, tiene 24 años, ya va a completar su segunda temporada en el Madrid. Nadie dijo que iba a ser fácil. Lo mejor que puede hacer es trabajar con buena actitud, cosa que nunca le ha faltado. Sus condiciones no están en duda y hoy está en el equipo más importante del mundo. Ojalá él lo entienda, sus jefes invirtieron una gran cantidad de dinero y seguro no lo van a dejar ir tan fácil. La constancia, la paciencia y la disciplina tienen su premio. Esas tres condiciones son fundamentales para acompañar el talento natural que le sobra. No hay razón para pensar que las cosas no pueden mejorar. Aguanta, James, aguanta.

Conoce más
Ver todas las noticias
Read more!
Read more!
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.