Columna de Antonio Casale: panorama oscuro

James Rodríguez es hoy el mejor futbolista colombiano en Europa. A pesar de haber caído en un equipo de Grecia, eso sí, el más grande de ese país, el goleador del mundial de 2014 ha logrado conectar varios partidos seguidos siendo protagonista, con goles y asistencias. Olympiacos no es líder en su liga y quedó último en su grupo de la Liga Europa, en donde estaban equipos de media tabla de ese continente como Friburgo, Nantes y Qarabag. Claro, James no jugó ese torneo, pero eso nos da una idea del presente de su equipo.

A la segunda ronda de la Champions avanzaron Mateus Uribe, con el Porto, en donde es un utilitario y cumplidor volante; Luis Díaz, con el Liverpool, pero está lesionado —faltará ver cómo vuelve el próximo año—; Dávinson Sánchez, que es suplente en el Tottenham, y Santos Borré, que juega muy poco en el Eintracht Frankfurt. En la Liga Europa solo estará Juan Guillermo Cuadrado, habitual titular en el peor momento de los últimos años de la Juventus de Turín. Convengamos en que con todo y eso es el único compatriota, junto a Díaz, que juega en un equipo grande de Europa. En Italia ningún colombiano se destaca, a pesar de que los nuestros solían brillan allí. En Inglaterra se han venido a menos Estupiñán y Yaser Asprilla, mientras Sinisterra, que tuvo un buen comienzo en el Leeds, se lesionó y estará por fuera un buen tiempo.

En España, Falcao pasa la mayor parte del tiempo en el banco y nadie más saca la cara por los nuestros. En Francia, Luis Javier Suárez es suplente en el Marsella y no hay otro. Así las cosas, habría que ir a Estados Unidos, en donde Chicho Arango se coronó campeón con Los Angeles FC y marcó 18 goles. En México nadie reportó grandes titulares en este semestre, ni en Brasil, en donde Jhon Arias es un prometedor delantero del Fluminense. En Argentina, de vez en cuando brillan Quintero y Borja en River sin ser grandes protagonistas. En cambio Villa y Fabra se coronaron campeones siendo importantes. Entonces miremos la liga nuestra, los goleadores son veteranos como Dayro Moreno, Luis Carlos Ruiz, Carlos Bacca y Adrián Ramos. De pronto el treintañero Leonardo Castro, del Pereira, sería el hombre a observar. Carlos Gómez y Daniel Ruiz, de Millonarios, son promesas todavía por consolidar y Sebastián Gómez, el volante de Nacional, está en un bache importante. Tal vez Dibier Cambindo, a sus veintiséis años, pueda ser el nombre más certero al que se le pueda apostar.

Es un delantero que tiene gol y sabe jugar con sus compañeros, entra hasta ahora en su etapa de madurez. Ojalá de aquí a marzo, cuando cominenzan las eliminatorias, el rendimiento de nuestros mejores hombres mejore, pero Néstor Lorenzo debe tener claro que la bonanza de individualidades ha terminado. Habrá que apostarle a una idea colectiva para volver a reír.

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