El equipo de todos está cada vez más cerca de volver a un mundial. Todo parece indicar que esta vez, como corresponde con el linaje de nuestros jugadores, se obtendrá una clasificación tranquila y anticipada. Pero para eso hay que vencer a Perú, que no está pintado en la pared.
Los dirigidos por el uruguayo Sergio Markarián han cedido mucho puntos, pero nadie les ha pasado por encima. Ajustan siete partidos invictos, no pierden desde octubre de 2012. En los últimos juegos contra Colombia han tenido distinta suerte en cuanto a resultados, pero en cuanto a funcionamiento, han representado en las dos oportunidades mucha dificultad.
En cuartos de final de la Copa América de 2011 pasaron por encima nuestro. Fueron justos ganadores. En cambio, en el juego de ida por estas eliminatorias, la cosa fue más pareja, eso sí, con mayor efectividad para Colombia. Bajo las órdenes de Gómez, el nuestro era otro equipo en lo colectivo; el anterior entrenador hacía que sus jugadores se mostraran amarrados y ultradefensivos a pesar de las armas ofensivas con las que contaban. Ya para el juego de Lima por estas Eliminatorias, había llegado Pékerman, aunque a esas alturas apenas estaba apagando el incendio.
Los peruanos cuentan con un poder ofensivo que en la Eliminatoria no ha podido ser contundente, salvo en los más recientes juegos. No cualquier selección se puede dar el lujo de contar con jugadores como Pizarro, Farfán, Guerrero y Juan Vargas para armar su plan de ataque.
La clave del juego a favor de Colombia debe estar en la mitad, donde los incas no cuentan con hombres netos de recuperación. Retamoso, Lobatón y el mismo Vargas serán los encargados de quitarle la pelota a Colombia en la zona del campo. Pero estos tres hombres pasan serios problemas a la hora de quitar el balón, porque son más de corte mixto y de manejo de la pelota.
De la retaguardia peruana podemos decir que han logrado consolidarse en lo colectivo a través del proceso Markarián. Herrera, Zambrano, Rodríguez y Yotún son nombres que no dicen mucho, pero que en los últimos juegos han lucido concentrados y han cometido pocos errores. El arquero Fernández es un gran atajador, pero ofrece ventajas en el juego aéreo, situación que bien podría aprovechar Falcao.
Por otra parte, mientras Colombia está en su mejor momento mental, Perú se juega sus restos en Barranquilla y tal vez ese es el punto a explotar, la presión que sobre ellos ejerce la tabla de posiciones. Colombia debe ganar, pero Perú no será fácil.
