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“Klara y el Sol”

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Armando Montenegro
11 de abril de 2021 - 03:00 a. m.
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Cuando la humanidad tiene suficiente evidencia de que está entrando a una nueva época y cruzando un umbral hacia lo desconocido, sus novelistas, con frecuencia, imaginan el mundo por venir. Los libros de Verne se anticiparon a los adelantos del siglo XX, Orwell y Huxley describieron regímenes que esclavizaban y manipulaban a los seres humanos, Atwood pintó una horrible dictadura religiosa que había derrocado al gobierno de Washington y reducido a las mujeres a una servidumbre como la del Antiguo Testamento. Más recientemente, Kazuo Ishiguro nos contó la vida de un grupo de jóvenes que descubrieron que eran clones y cuyo objeto era dar sus órganos a los humanos. Y ahora nos habla de un futuro, ya no tan distante, en el que los robots comparten íntimamente los dramas de los seres humanos.

A diferencia de los autores que se concentran en vislumbrar los inventos y el futuro de las organizaciones sociales, Ishiguro se vale de los clones y de los robots para reflexionar sobre temas como el amor, la soledad, la empatía y la solidaridad.

La protagonista y narradora de su último libro es Klara, un robot superinteligente, movido por energía solar, capaz de leer las emociones y sentir lo que sienten los humanos. Su trabajo es ser la amiga artificial de una adolescente, Jossie, una joven que enfermó al someterse a un cambio genético, necesario para ir a la universidad y ser parte de la élite de una sociedad brutalmente estratificada por la tecnología y los privilegios.

Klara es capaz de analizar y descifrar los dramas y tensiones alrededor de Jossie y no escatima esfuerzo ni sacrifico alguno para ayudarla y socorrerla. Desempeña un papel que los humanos —la madre, el novio, la empleada doméstica—, cada uno inserto y atrapado en sus propios dramas, no pueden cumplir. En un medio dominado por la tecnología y la competencia, el desprendimiento, la abnegación y la solidaridad parecen tareas asignadas únicamente a este robot.

Cuando presiente la pronta muerte de Jossie, ¡Klara no encuentra otra opción que rezar! Le pide auxilio al Sol, para ella, como antes para los incas o los egipcios, la fuente de energía y vida. Y ante ese ser superior, a la manera de los antiguos humanos, promete un sacrificio para que Jossie recupere su salud. A costa de su propio bienestar, destruye una máquina que causa polución, un mal que enfurece al Sol y enturbia su luz bienhechora sobre el planeta.

En el pequeño mundo en que se mueve, este robot llena el vacío que dejan los desplazamientos, los conflictos y la propia muerte sobre seres aislados y solitarios: una madre divorciada y sumergida en su trabajo; un padre distante y extraño; un amor adolescente que, como casi todos, se extingue irremediablemente; la educación a distancia de Jossie (semejante a la que hoy impone la pandemia); una hermana prematuramente muerta por el fallido intento de su mejoría genética.

El abandono y la soledad finalmente le llegan a la propia Klara. Termina, con su memoria y algunas de sus facultades intactas, desechada en un depósito de equipos obsoletos. A diferencia de algunos humanos envejecidos, solos y tristes, este brillante robot no siente amargura ni desespero, sino satisfacción por la muchacha que, gracias a sus esfuerzos, pudo seguir con su vida, aunque ella hace rato la hubiera olvidado.

Kasuo Ishiguro (2021), “Klara and the Sun”. New York, Knopf.

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Rocio(21165)13 de abril de 2021 - 02:47 p. m.
Que tema tan interesante y profundo. También creo que después de leerla (no he leido a Ishiguro) tendré mi propia crítica que va de la mano de lo que soy, vivo e imagino y tal vez sea similar o me abre otros caminos. Gracias
Hernando(pt5zl)12 de abril de 2021 - 05:30 p. m.
Gracias por compartir la noticia del libro, pero POR FAVOR, en otra ocasión evítenos el "spoiler", no nos arruine el placer del suspenso al leer la novela!!!
Luis(43646)11 de abril de 2021 - 05:39 p. m.
Muy buena la entrevista que hace poco le hizo Anne McElvoy a Sir Kasuo en The Economist, incita a leer la novela sin hacer spoiler.
Elvia(m61d9)11 de abril de 2021 - 04:34 p. m.
Carajo.
Atenas(06773)11 de abril de 2021 - 03:41 p. m.
Noooo, hermano, mató la pasión q' encierra la amena lectura de una novela como la descrita: the end. Y sobre esos tales sentimientos q' nos agobian como especie, y de cómo sobrellevarlos, es el dilema de la vida, entonces todos necesitamos una Klara.
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