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Aura Lucía Mera
15 de agosto de 2023 - 02:05 a. m.
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El Mediterráneo se ha convertido en un cementerio de hombres, mujeres y niños. Seres que simplemente buscaban una opción de vida, rechazados por el resto del mundo. No tienen nombre, no le importan a nadie. Hace algunos años me encontré de casualidad en un festival de literatura con una conocida de origen italiano indignada porque “esos inmigrantes pobres y peligrosos” estaban invadiendo la isla de Lampedusa, ese sitio paradisíaco de millonarios y turistas elegantes. “No hay derecho, se están tirando el turismo y el confort, y acabando con la isla”. Quedé atónita sin saber qué responder.

Ya da cosa escuchar la famosa canción de Joan Manuel Serrat: “Nací en el Mediterráneo”. Las palmeras levantinas a lo mejor se convirtieron en testigos mudos de esta tragedia que aumenta y sigue.

Se nos olvida que la humanidad ha sido desde su comienzo —muchos miles de años antes de que el catolicismo inventara la historia de Adán, Eva, la costilla, la fruta y la hoja de parra— una historia de peregrinajes continuos, desplazamientos, emigrantes e inmigrantes. Europa, Asia, las Américas, Oceanía y África son un revuelto de nómadas, invasores y refugiados. Nadie es totalmente autóctono ni de una etnia pura. Que se atreva a alzar mano el purasangre.

Si Jesucristo descendiera de nuevo a la Tierra, quedaría desconcertado. “Amaos los unos a los otros” se convirtió en “mataos los unos a los otros” y el que gana ostenta el poder y la riqueza. Pero me estoy desviando…

En este universo feroz los pobres sobran y huelen feo. Los inmigrantes son un peligro. Se nos olvida que Estados Unidos fue colonizado por irlandeses y holandeses que se morían de hambre y españoles aventureros y rapaces. Australia se “civilizó” con exconvictos. En África, la cuna de la humanidad, blancos perniciosos agarraron a millones de seres y los sacaron encadenados de sus países como esclavos sin alma y sin derechos. Y América Latina, ni hablar. Chilenos y argentinos descienden de los barcos; Ecuador, Colombia, Perú y Bolivia son una mezcla de todo: piratas, esclavos, indígenas, corsarios ingleses y faltan ingredientes para el sancocho.

Estamos a punto de exterminarnos, afortunadamente. No supimos entender ni agradecer ni cuidar este planeta. Fuimos la más grande equivocación del Creador, su animal más depredador, monstruos deseosos de sangre y poder, inmisericordes con los más vulnerables, ávidos de riqueza y bienes materiales a costa del que sea y como sea, atascados en el odio, la envidia y el rencor.

Mediterráneo, cementerio de agua. Si sus olas en tristes orillas pudieran hablar, si sus espumas nos contaran la historia de cada uno de los náufragos que embarcaron llenos de esperanza y ahogaron sus dolores en el fondo del mar.

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Nelson(23874)16 de agosto de 2023 - 03:23 p. m.
Gracias por su columna pero sobretodo por el párrafo final....sublime. "Mediterráneo, cementerio de agua. Si sus olas en tristes orillas pudieran hablar, si sus espumas nos contaran la historia de cada uno de los náufragos que embarcaron llenos de esperanza y ahogaron sus dolores en el fondo del mar"
Carlos(34560)15 de agosto de 2023 - 10:20 p. m.
El problema con los inmigrantes es que llegan a tierras con costumbres diferentes a las de ellos y quieren que esa tierra se adapte a sus costumbres y es al contrario. Por ejemplo: Si no me gusta el vallenato y la música a alto volumen yo no puedo irme a vivir a las costas; no me adaptaría y si los costeños se van a vivir al interior del País no pueden llegar con sus estridencias porque chocarían con las costumbres de aquellos. El que llegue se debe adaptar, es así de simple. Yo lo experimenté.
Hector(31467)15 de agosto de 2023 - 10:06 p. m.
Para muestra el demonio blanco; el anticristo Trump!. Que será el que desate el cataclismo si llega a ser electo otra vez por esa parrandada de idiotas que creen en él.
Santiago(31882)15 de agosto de 2023 - 09:05 p. m.
Aura Lucía, el catolicismo no inventó a "Adán, Eva, la costilla, la fruta y la hoja de parra" fueron los judíos hace unos 4.000 años y sí todos somos inmigrantes en algún sitio y hemos sido maltratados y maltratadores en alguna época de nuestras vidas o de los antepasados. A estudiar Aura Lucía. Lo que dice es un error craso por su odio a la iglesia católica, única institución que ha hablado y ayudado a los inmigrantes a Europa por el Mediterráneo
  • daniel(84992)18 de agosto de 2023 - 04:30 p. m.
    Pies Santi, la católica iglesia es la continuación de las invenciones y mitos de los semitas, como lo es el islamismo y otras repulsivas y atrabiliarias yerbas.
  • Nelson(23874)16 de agosto de 2023 - 03:18 p. m.
    Y de la esencia del artículo, ¿tiene alguna opinión o todo se le va en descalificar a la autora?
  • jairo(19688)15 de agosto de 2023 - 10:58 p. m.
    Favor leer el Código Davinci, sobre todo capítulo 15.
Orlando(n4yrx)15 de agosto de 2023 - 03:05 p. m.
Nosotros, los humanos hemos estado construyendo lo que algunos textos religiosos denominan el Apocalipsis en el cual estamos. Si no cambiamos de mentalidad depredadora, sucumbiremos en nuestro individualismo. "Ese ser" colectivo que fuimos ha ido desapareciendo. Rescatemos esa mirada del mundo hacia el mundo. Por más Solidaridad.
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