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BioDiversidad 2019

Brigitte LG Baptiste
12 de noviembre de 2020 - 03:00 a. m.

Como todos los años, el instituto Alexander von Humboldt publica su reporte acerca del estado y tendencias de la biodiversidad colombiana, un compendio estructurado de fichas técnicas de gran riqueza y robusto fundamento factual que permite la trazabilidad íntegra de cada dato con el cual se construye el informe. En este sexto reporte se incluyen 23 temas, todos apasionantes, pero de los que quisiera destacar los relativos a las respuestas a la transformación negativa de los ecosistemas en donde habitan y prosperan las especies vivas que contribuyen con nuestro bienestar cotidiano, principalmente a través de la provisión de unos servicios que nos cuesta reconocer y valorar.

En primer lugar, se presenta una ficha que habla de la coexistencia entre la biodiversidad y la navegabilidad del río Magdalena, construida gracias a un convenio de cooperación de la entidad científica con Cormagdalena a propósito de los debates que cuestionaban una nueva intervención del río exclusivamente basada en la ingeniería y que ignoraban la complejidad social y ecológica de la cuenca. La modificación indispensable del cauce, una intervención derivada de la fatalidad de la erosión andina que ha rellenado el río hasta enloquecerlo, se plantea ahora como un trabajo integral y regenerativo que considera sus efectos en las comunidades de pescadores, las economías ribereñas, el turismo y, por supuesto, la necesaria recuperación del hábitat para las especies vivas, muchas de ellas únicas.

El segundo caso que resalto es el estudio que relaciona la sostenibilidad de las actividades ganaderas con la vida y obra de los escarabajos estercoleros, una asociación entre especies muy distintas en todo sentido y que está permitiendo la aparición de un modelo ecosistémico donde la cría de vacas en medio de ámbitos semisilvestres permitiría la convivencia de los animales humanos con el resto de seres vivos de manera colaborativa. Una ficha adicional relaciona la evolución de la institucionalidad y los instrumentos de gestión disponibles para hacer de la ganadería una de las actividades centrales de la restauración ecológica nacional, asumiendo una deuda generacional espinosa pero inexorable.

Finalmente, en el reporte se hace una apretada síntesis de las herramientas que se han diseñado para restaurar diversos paisajes de la Amazonia colombiana, con todo y su estructura de costos, demostrando que las buenas prácticas tienen la capacidad de proveer suficientes ingresos monetarios a la población a partir del manejo sostenible de múltiples servicios ecosistémicos, dentro de los cuales están la producción de mieles, el enriquecimiento forestal, las actividades productivas basadas en cacao, plátano, yuca, caucho y maderables, el ecoturismo y los sistemas silvopastoriles integrados.

Existen muchos otros temas relacionados en este sexto reporte que continúa promoviendo el uso de todas las ciencias y una perspectiva transdisciplinaria para la gestión de la biodiversidad, tal vez la tarea más importante para la Colombia del siglo XXI: sólo el reconocimiento de una economía verdaderamente verde y circular podrá generar una cultura de la sostenibilidad en plena época de caos climático. La otra opción, parece, sería irnos a vivir a las galerías de los metros y las minas subterráneas a comer champiñones, mientras esperamos que el tiempo aclare…

Temas recomendados:

 

Celyceron(11609)12 de noviembre de 2020 - 08:30 p. m.
El problema de vivir en las galerías del Metro, es que en Colombia solo hay uno y no es subterráneo. Vuélvanos a mostrar la primera opción. Es mucho más viable, tener economías verdes y generar una cultura de sostenibilidad. Gracias por su columna, Doctora Baptiste.
Francisco(82596)12 de noviembre de 2020 - 01:46 p. m.
Hola, amigos. Lo más urgente es cambiar los planes de este gobierno que destruyen los ecosistemas y deterioran el medio ambiente. Acabar con la fumigación con glifosato; acabar con la minería ilegal que destruye ecosistemas y envenena los ríos; acabar con la tala de bosques y selvas; proteger la vida y trabajo de los ambientalistas. Que sepamos para qué sirve el ministerio del medio ambiente.
  • Celyceron(11609)12 de noviembre de 2020 - 08:32 p. m.
    No será posible, Francisco. La nueva política económica es extractivista. Vender licencias da grandes ganancias a los corruptos que están en el poder.
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