En esta historia Chile es el punto de partida, también el de llegada. Esta historia emerge del pozo de los recuerdos y – si hacemos la tarea– nunca terminará de morir, como tantas otras. El 26 de septiembre de 1973, 15 días después del bombardeo al Palacio de la Moneda en Santiago, del asesinato del presidente Allende y de que iniciara la dictadura de Pinochet, la selección de futbol de ese país viajó a la Unión Soviética para jugar el partido de ida del repechaje para el Mundial de Alemania 1974.
Sus jugadores, entre ellos Francisco Valdéz y Carlos Caszely, fueron acusados de emisarios de la dictadura y por poco no pueden ingresar...