Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.

El fracaso del éxito

Camilo Camargo

13 de octubre de 2019 - 12:00 a. m.

Diversos estudios muestran cómo en los últimos años las tasas de ansiedad y depresión en los jóvenes han aumentado de manera alarmante. Existen varias hipótesis sobre las razones para este incremento incluyendo el uso indiscriminado de aparatos electrónicos, el enfoque de crianza basado en una falsa idea de felicidad y la poca tolerancia a la frustración desarrollada en la niñez.

PUBLICIDAD

Uno de los factores que sin duda está afectando la salud mental de los adultos jóvenes tiene que ver con el concepto de éxito que es manejado en su proceso de formación tanto por la familia como por los centros educativos. Queremos que todos los jóvenes sean exitosos, pero en muchos casos limpiamos el camino para que lleguen al éxito sin tropiezos ni dificultades. Nuestra predisposición como educadores y padres de familia es procurar que a nuestros niños nunca les falte nada. Por esto trabajamos duro, los cuidamos para que no se golpeen, evitamos que tengan fracasos en la vida y adelantamos muchas acciones que buscan protegerlos.

Algunas de esas acciones que hacemos con la mejor voluntad como adultos, pueden a la larga perjudicar a nuestros niños. Parece ser una contradicción, pero múltiples estudios en los últimos años han mostrado cómo varios jóvenes que han sido sobreprotegidos cuando niños presentan cuadros psicológicos complejos cuando salen de la adolescencia. Al no tener las oportunidades de enfrentarse a situaciones difíciles y retadoras, los jóvenes no desarrollan recursos propios ni herramientas para enfrentarse a las situaciones adversas.

El concepto de éxito hoy en día está muy ligado a reducir el número de fracasos que tienen los jóvenes al crecer. Leía en un artículo de un periodista que salió al parque de su barrio y se encontró con algunos niños que tenían protección en sus codos y en sus rodillas para que no se rasparan si se caían. Lo importante en nuestro rol como formadores no es evitar las caídas ni los raspones, es ayudar a que los niños y jóvenes se levanten y aprendan de su caída, de su error.

Read more!

Hay diversos estudios sobre la importancia de las habilidades socioemocionales, incluyendo el trabajo de la doctora Angela Duckworth en la Universidad de Pennsylvania, quien dice que las personas que desarrollan más persistencia (grit en inglés) son más exitosas que las que no son tan persistentes. Esos estudios son fascinantes, pues muestran el tipo de experiencias vividas por personas con un alto grado de persistencia, que lo que más tienen en común son numerosos fracasos y la capacidad de enfrentarse a ellos y resolver situaciones complejas.

¿Cómo podemos cambiar este paradigma de que nuestro papel como adultos es limpiarles el camino a los jóvenes para que logren el éxito sin dificultades ni obstáculos? Dejemos que las oportunidades que les brinda la gran escuela de la vida les muestre la realidad: no siempre se puede ganar; siempre va a haber fracasos, retos y frustraciones. A veces esas oportunidades de aprendizaje del error se dan con experiencias como no ser escogidos para un evento o representación, tener una mala calificación en un examen o proyecto y otras veces con una raspadura en el parque. Pero, sobre todo, se pueden dar con límites claros que ponemos como adultos y que lleven a que los niños entiendan que no siempre pueden obtener lo que quieren.

Read more!

Cuando no somos conscientes del aprendizaje que se genera gracias a las experiencias de vida y a los límites, nuestra reacción es reducir la frustración y el sufrimiento de nuestros hijos e hijas. Partamos de la base de que para llegar al éxito es necesario enfrentarse al fracaso y, más que reducirlo, debemos buscar maneras de acompañar esos procesos para que cada experiencia sirva como una gran oportunidad de ser, de crecer y de desarrollar persistencia y otras habilidades blandas.

Está claro que el concepto del éxito como lo venimos trabajando actualmente es un fracaso para la sociedad. Transformemos entonces el fracaso de este concepto errado de éxito al aprovechar los fracasos para ser más exitosos.

Conoce más
Ver todas las noticias
Read more!
Read more!
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.