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Estamos en esa época del año en toca pensar en la declaración de renta. Cada día la DIAN recoge más y más datos sobre nuestras finanzas al punto que nos ofrece una declaración de renta sugerida. A la DIAN le falló el registro de datos de la información exógena de 2023, las declaraciones sugeridas de 2023 para muchas personas están enloquecidas.
Resulta que hay quienes deben reportar a la DIAN los “ingresos recibidos para terceros” (le llaman “información exógena”). Esto significa que deben reportar en un formato los pagos que hacen a nombre de terceros. Registran cuánto pagaron, a quién y el monto total que recibieron del tercero para eso. Pues bien, la DIAN para 2023 duplicó los datos, puesto que en la declaración de renta sugerida está apareciendo lo recibido por cada persona y además, a nombre de esa persona, el total de lo que la organización recibió del tercero.
Me pasó. Karisma ejecuta proyectos con dinero de terceros, cuando participo de esos proyectos una parte de mi ingreso proviene de dinero que esa entidad ejecuta a nombre de algún tercero. En mi declaración de renta sugerida para 2023 por la DIAN aparece lo que me pagaron por esos proyectos y también el total que Karisma recibió para la ejecución de esos proyectos. El problema está en lo que se registra como “ingresos recibidos para terceros” en el renglón 74 “ingresos brutos rentas no laborales”. De acuerdo con la DIAN yo ingresé en 2023 una cifra millonaria que no es real.
Mi problema se soluciona fácil: Karisma me expide un certificado en el que consta lo que efectivamente recibí y yo ignoro la declaración de renta sugerida por la DIAN. Es decir, le pido a la contadora que haga mi declaración de renta usando los certificados como soporte. Pero, que lo pueda solucionar fácil no significa que el problema sea menor.
El problema es grave con las personas que fueron parte de esos proyectos y recibieron pequeñas sumas por algunos servicios -como hacerse cargo de un almuerzo en territorio-. Con frecuencia estas son personas que no declaran renta y ahora, por cuenta de un error en la DIAN, están apareciendo como que tuvieron ingresos millonarios en 2023 y deben declarar. Algunas de estas personas están llamando asustadas o incluso sospechando de Karisma -mientras le pagan a ellas montos de cinco cifras, hacen chancucos millonarios-. Otras personas no se han dado cuenta.
Paralelamente está el peso de autoridad de un documento como la declaración sugerida de la DIAN. La Declaración de Renta Sugerida es una herramienta que promete facilitar la vida de las personas pues nos evitamos intermediarios, ahorramos costos y tiempo si confiamos en la DIAN. Sin embargo, los y las contadoras navegan diariamente entre inconsistencias en la información de la entidad. Ese gremio aprendió a desconfiar sabe que “sugerida” no es sinónimo de “incontrovertible”. Pero, la audiencia de ese documento es el usuario final -las personas- y no dicho gremio, por eso la DIAN tiene una responsabilidad mayor porque se trata de gente que no es experta, que le cree y le tiene miedo.
La DIAN no ve esto y se comporta como siempre. Como es costumbre, tampoco en este caso hay reportes oficiales de que la DIAN tenga un problema, no lo dice, ni siquiera cuando enfrenta un problema donde tiene más responsabilidad con las personas, como este. Las organizaciones afectadas son las que están respondiendo a las personas impactadas, informan lo que pasa y avisan a la DIAN que se limita a recibir la novedad. Solo queda esperar a que la DIAN corrija la inconsistencia. Eso sí en algunos hilos de X veo que reconocen que tienen unas inconsistencias en la información “exógena”, sin detalles.
¿Qué tan generalizado es este problema? ¿Cuántas de las personas que no declaran se darán cuenta de lo sucedido y podrán actuar? ¿Estas personas serán perseguidas en unos años por este error de la DIAN? Es decir, ¿pueden cobrarles por algo que la DIAN simplemente sugería? ¿Quién responde por los dolores de cabeza que la inconsistencia crea en las organizaciones?
En este contexto me pareció muy pertinente lo que dice @somoscomunidadc en un trino:
Al salmo respondemos todos:
“Podemos hacer la renta sin el reporte de exógena de la DIAN porque es una guía y no un soporteeeeeeee...
Los soportes los debemos solicitar al cliente y no limitarnos a copiar y pegar el reporte de la DIAAAAANNNN”
Palabra de comunidad c.
Finalmente, este es un recorderis de que aunque la creciente datificación de nuestras sociedades nos invite a la confianza total, siempre hay riesgo de errores. Siempre debemos exigir mecanismos para enfrentar esos errores, sobre todo porque con frecuencia las personas más afectadas por estos “problemas del sistema” son las más vulnerables. No confiemos ciegamente en la tecnología.
