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Si antes era una promesa que el periodista podía hacer y sostener, al menos en países con protecciones legales para garantizar la libertad de prensa, hoy no tanto.
La próxima semana el tema se discutirá en el Congreso Mundial de Medios de Comunicación. Allí se hablará de cómo la imposibilidad de cumplir la promesa tiene sus bases en las revelaciones del ex técnico de la CIA, Edward Snowden, sobre los programas de vigilancia masiva del gobierno de los EEUU, que repercutieron en todo el mundo. Sin embargo, si antes de conocer los alcances de la vigilancia masiva, sabíamos que los periodistas son objetivo concreto de actividades de vigilancia (legal e ilegal) hoy tenemos que sumarle a su vulnerabilidad, algunas políticas que facilitan la situación, por ejemplo, las políticas de retención de datos (muchas veces justificadas con argumentos legítimos -seguridad nacional o terrorismo- pero llevadas a extremos que choca con derechos fundamentales) a la que están obligadas las empresas que median las comunicaciones (por ejemplo, quien provee el acceso a Internet en su casa o oficina).
Entonces, como pregunta UNESCO en un estudio que presentará en el Congreso, “¿Es posible proteger las fuentes periodísticas en la red?”. Primero, se necesitan cambios en las prácticas de los comunicadores. No hay recetas mágicas, pero deben entrenarse en seguridad digital (ellos y sus fuentes); deben defender el cifrado y la intimidad en el diseño de las herramientas que usan, y ser conscientes (también los medios) que la seguridad digital es fundamental para la libertad de prensa. Pensando en esto, la FLIP con el apoyo de la Fundación Karisma, publicaron el Manual Antiespías para periodistas, que busca despertar el interés sobre el tema y brindar herramientas básicas sobre seguridad digital.
Ojalá los medios colombianos que participen en el Congreso asistan a la actividad y compartan el manual. Aunque el carácter evolutivo de las tecnologías y de los ataques no permite dar soluciones absolutas (al final si es un secreto mejor vuelva a un cara a cara sin equipos electrónicos), sí podemos entre todos mantenerlo vigente.
Ñapa: Acaba de salir el Informe sobre anonimato y cifrado del relator de la ONU para libertad de expresión. Recomendado para periodistas de esta época.
