Publicidad

Sí al porte de armas

Sigue a El Espectador en Discover: los temas que te gustan, directo y al instante.
Cartas de los lectores
08 de abril de 2025 - 05:00 a. m.
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

En el editorial del 27 de marzo, titulado “El Congreso quiere portar armas y atizar la violencia”, se ha afirmado que la violencia por armas ha disminuido un 23 % desde la prohibición, sugiriendo que vivimos en un entorno más seguro. Sin embargo, esa lectura parece ignorar lo que ocurre en las calles: múltiples bandas criminales fuertemente armadas operan solo en Bogotá, y ni qué decir del resto del país. Además, los titulares diarios evidencian el aumento de casos por porte y fabricación ilegal de armas. El “hurto”, muchas veces minimizado en el lenguaje institucional, ocurre con arma en mano, dejando víctimas físicas y psicológicas.

Mientras tanto, ¿qué protección real tienen los ciudadanos de a pie? La familia que llega a casa en su vehículo a altas horas de la noche está desarmada. El médico que sale antes del amanecer a cumplir con su turno, desarmado. La mujer que vive sola en un barrio inseguro, desarmada. El tendero que trabaja hasta tarde sin seguridad privada, también desarmado. Es decir, quienes cumplen la ley están completamente expuestos, mientras los criminales circulan con armamento de guerra.

El discurso sobre “la gente de bien” ha sido instrumentalizado por ideologías de derecha e izquierda, pero en la práctica, quienes están armados, matan, amenazan y extorsionan, no son precisamente ciudadanos comunes. Cuando alguien que ha cumplido los trámites legales para portar un arma actúa en defensa propia, es tildado de “vigilante” o “justiciero”. Se asume que, en los segundos críticos de una amenaza, esa persona tomó la decisión de juzgar y ejecutar, cuando en realidad reaccionó por instinto y necesidad.

Por eso, digo sí al porte y tenencia legal de armas, bajo regulación y formación. Sí a una doctrina del castillo que permita a los ciudadanos defenderse en su hogar, vehículo o negocio. Sí a penas más duras, sin beneficios procesales ni vencimientos de términos, para quienes porten armas de manera irresponsable o con fines criminales.

No se trata de fomentar la violencia ni de armar indiscriminadamente a la población. Se trata de reconocer que, hoy por hoy, existe un desequilibrio evidente: los criminales están mejor armados que quienes quieren vivir en paz. Si el Estado no puede ofrecer protección efectiva, al menos debe permitir que los ciudadanos ejerzan su derecho fundamental a defender su vida y la de sus seres queridos.

Víctor Terán, Bogotá

Envíe sus cartas a lector@elespectador.com

Conoce más

 

Hernando Escobedo(58851)10 de abril de 2025 - 12:36 a. m.
Francamente no es algo entendible la postura de darle la bienvenida a la propuesta de permitir la tenencia de armas, por varias razones, de mucho peso, que aquí mismo se han expuesto; me imagino, si esto sucediera, la cantidad de gente, de bien y posiblemente armada, ser víctima de criminales, expertos en el manejo de dichas armas.
Óscar Ardila(22193)08 de abril de 2025 - 05:51 p. m.
Imaginen por un momento, solo en Bogotá, cuando dos conductores se bajan a arreglar sus diferencias a puño limpio, y muchas veces con armas corto punzantes. Sí así nada más ocurren tragedias, cómo sería con dos conductores, cada uno con arma de fuego.
ECh(15232)08 de abril de 2025 - 05:41 p. m.
La evidencia rigurosa muestra que tener un arma aumenta la probabilidad de que le pase algo a la persona o a alguien de su familia, por accidente, por suicidios, o por intentar defenderse frente a alguien que tiene más práctica. Hay una ilusión de seguridad, pero la realidad es lo opuesto.
Diego Velez Jimenez(05722)08 de abril de 2025 - 05:32 p. m.
Colombia por naturaleza ha sido un pais violento con personas de bien sujetas al monopolio de las armas por parte del Estado y la criminalidad. El Estado NO CUMPLE con su mandato constitucional de proteger a la ciudadania. Por consiguiente debemos ejercer el derecho de portar armas y que este inscrito en la constitucion. Y si algunos les da por ser justicieros, bienvenidos son para limpiar a la sociedad de tanta criminalidad. Yo tengo ganas de comprar un Magnum 347 al estilo de Clint Eastwood
Carlosé Mejía(19865)08 de abril de 2025 - 05:28 p. m.
Completamente en desacuerdo: la tenencia de armas conduce a excesos e incrementa la violencia. Las armas, desde mi punto de vista, solo deben permanecer en las manos expertas de los integrantes de las fuerzas militares y la policía.
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.