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La seguridad de los firmantes de los acuerdos de paz

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17 de octubre de 2023 - 02:00 a. m.
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Voy a describir, en grandes líneas, la experiencia que tuvo el DAS brindando seguridad a los exguerrilleros del M-19, firmante de un acuerdo de paz. El objeto es señalar algunos factores que pudieron hacer que ese programa resultara exitoso, en tanto logró preservar la vida de los desmovilizados. El programa se desarrolló hace 30 años, por lo que debe mirarse conservando las respectivas distancias, las diferentes condiciones y circunstancias, el número de desmovilizados y los medios requeridos para atenderlos.

La situación se planteó en un consejo nacional de seguridad y, después de examinar varias alternativas, se concluyó que lo indicado era que lo asumiera el DAS, institución que para ese entonces estaba bajo mi dirección. No era una tarea sencilla, por cuanto sus funcionarios habían tenido una clara confrontación con esta organización guerrillera, dada su condición de grupo urbano. Por eso fue necesario reunir, plantear y discutir la cuestión con el personal directivo y posteriormente con el grupo de escoltas que iba a asumir esa función, dadas las naturales resistencias que existían.

Por otro lado, sostuvimos reuniones de trabajo con Antonio Navarro, Vera Grabe y Otty Patiño, entre otros de los dirigentes, quedando encargado este último de coordinar las tareas en lo que tenía que ver con el M-19. Se acordaron los distintos esquemas de protección. Se impartieron cursos de entrenamiento a los exmiembros del M-19 que iban a brindar protección conjuntamente con los funcionarios del DAS y el programa se sometió al mismo tipo de controles e inspecciones que tenían que cumplir los miembros de la institución. De esa manera, era obligación dejar guardadas las armas y los vehículos al final de la jornada, debían reportarse las misiones a cumplir, se llevaba control de las actividades, se implantaron formas de supervisión y se suministró una identificación especial a los exguerrilleros que prestaban las tareas de protección. Cada grupo de protección era dirigido por un agente del DAS del nivel profesional.

Del programa se puede decir que cumplió a cabalidad su cometido, en tanto no se presentaron atentados ni hechos que lamentar sobre los desmovilizados, por lo que es obligado reconocer que se logró gracias al profesionalismo de los miembros de la institución, a la voluntad y el deseo de los reinsertados de aceptar sus nuevos roles dentro de la sociedad, al compromiso de los dirigentes del M-19 para hacer que el programa cumpliera su cometido y al apoyo brindado por el Gobierno, que suministró los recursos para su funcionamiento, así como para adquirir el armamento y los vehículos que se requirieron. Debe tomarse en cuenta que el DAS era una institución de carácter civil, sometida directamente a las órdenes del presidente, lo que seguramente facilitó la adopción de dicho programa.

Fernando Brito R. Exdirector del DAS.

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