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Hace poco me contaron de un conocido que perdió la compra de unos tiquetes con destino a uno de los países Schengen pues había asumido que la visa había sido eliminada y no hizo el trámite a tiempo.
Durante el 2012 fue noticia que muchos colombianos ingresaron a territorio turco sin papeles y eran detenidos y obligados a retornar. Todos ellos tenían la certeza de que la eliminación de la visa para ese entonces era un hecho.
Si analizamos la forma en la que los medios colombianos transmiten las noticias, este tipo de anécdotas dejan de ser tan absurdas. Algunos se acordarán de la famosa ronda infantil en donde los niños cantan “Juguemos en el bosque mientras el lobo no está, ¿el lobo está?”, y el niño que asume el papel del lobo va anunciando lentamente cómo se alista antes de salir a atrapar a otros niños: “Me estoy despertando”, “me estoy poniendo los pantalones”. Bueno, nuestros medios tienen a veces el descuido de convertirse en ese lobo: anuncian medidas que van a suceder pero que todavía no son un hecho.
Las anuncian con titulares que pretenden llamar la atención del lector pero sin el cuidado de evitar desinformación: “Santos celebró aprobación de exención de visa Schengen”; “Cambios en pico y placa en el centro”; “Ley antitrámites quitaría la revisión tecnicomecánica”. Titulares como éstos se repiten una y otra vez durante semanas sin enfatizar que se trata de un proceso en curso y todavía inconcluso.
Algunos dirán que es cuestión de cuidado al leer las noticias y tienen algo de razón. Sin embargo, el papel de los medios no es anunciar por anunciar sino informar y cuando el anuncio no es informativo puede haber alguna falla, aunque sea menor, en su deber. Claro, si alguna medida acarrea ciertas irregularidades se debe comunicar para abrir el debate, pero con esta intención y este tono. Cuando sólo se busca atraer la atención de la audiencia es probable que quedemos atrapados por el lobo sin enterarnos cuándo estuvo listo de verdad.
