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Los límites del “orden”

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Catalina Uribe Rincón
10 de julio de 2021 - 05:30 a. m.
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La semana pasada el gobierno chino decidió bloquear las cuentas de redes sociales con contenido LGBT+ adscritas a grupos y clubes universitarios. La medida obedece a la creciente intolerancia que ha tenido dicho gobierno frente a cualquier tipo de manifestación. Entre los “rebeldes” se ha incluido también a los grupos feministas y a las comunidades de trabajadores. Sí, así de irónico como lo leen: un gobierno de tradición comunista en contra de los sindicatos. Los estudiantes chinos alrededor del mundo están indignados, en especial por el apoyo que algunos grupos conservadores de países democráticos les han dado a estas medidas.

La obsesión que produce China en los conservadores es muy peculiar. Recordemos la infinidad de veces que Donald Trump pronunció la palabra “China” como incitador de miedo. Los chinos fueron catalogados una y otra vez como invasores, propagadores de un comunismo malévolo y creadores de virus. “China pagará un gran precio por haber enviado esa terrible enfermedad”, afirmó el entonces presidente estadounidense con respecto al coronavirus. Meses después, sin embargo, muchos de los mismos conservadores alrededor del mundo alabaron el orden de China en el manejo de la pandemia. “¡Allá la gente sí obedece!”.

Y es que, entre tanto caos e incertidumbre, a varios se les salió el Xi Jinping que llevan dentro. Recientemente, como lo recogió el columnista de este diario Pascual Gaviria, se dio el encierro forzado de 265 estudiantes en España por estar contagiados de COVID-19 o por haber estado en contacto con alguien enfermo del virus. Soluciones desesperadas de control que claramente violaron la libertad de los estudiantes e hicieron añicos cualquier criterio de proporcionalidad, pero que se excusaron en aras del orden de la vida común.

Muy a pesar de lo que dice nuestro escudo, los gobiernos en Colombia también se la pasan sacrificando esa anhelada libertad por el orden que la sigue. Recientemente la CIDH hizo un enorme esfuerzo por evaluar y construir un informe que nos permita mejorar el uso de la fuerza policial y garantizar el respeto de los derechos humanos. El Gobierno colombiano, con su caracterizado desdén frente a cualquier crítica, decidió no tomárselo en serio. No contento con esto, Duque quiere además una ley antivandalismo y antidisturbios que, por supuesto, no aporta nada y sólo contribuye a seguir estigmatizando discursivamente la protesta.

Claro, como bien lo recordó Agustín de Hipona, el orden es fundamental para que la injusticia no pulule y para que las almas humanas y sus inclinaciones al mal no se perviertan del todo. Es más fácil ser justo en una ciudad justa que en medio de la violencia y la injusticia. Pero es que ahí está el asunto: el orden es instrumental. El orden está ahí para la libertad, no al revés. La libertad no es sólo un derecho. Es la fuente de dignidad humana. El paso por este mundo tiene sentido solo si somos nosotros y no el Estado los que nos afirmamos en la vida.

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Fernando(70558)11 de julio de 2021 - 12:43 a. m.
La ley antivandalismo de Duque es la mejor manera de seguir provocando a los jóvenes de barrio para que continúen en la calle y crear el caos con el ESMAD. De esta manera se mantiene la violencia en las calles y por ende, la justificación para que millones de ciudadanos ELIJAN mano dura para el 2022, tal como lo hizo Uribe con las FARC. ¡¡¡NO SE DEJEN PROVOCAR!!!
Pepegrillo(47823)10 de julio de 2021 - 02:18 p. m.
Catalina Uribe parece no haberse percatado que en los regímenes comunistas no se permiten los sindicatos, las ONG o asociaciones de cualquier género. El comunismo en cualquiera de sus formas es liberticida. ¡Ah!, el petrismo es una de esas perversas formas del comunismo, que nos quitara la libertad, el orden democrático y convertirá el diario vivir en un ejercicio de odios y venganzas sin fin.
  • LUIS(39179)10 de julio de 2021 - 06:47 p. m.
    Don Pepe: Independiente de lo que sea o no el comunismo, lo que sí está claro es que Petro no lo es ni lo pregona, y ud. lo sabe. Admitalo.
  • Jorge(9730)10 de julio de 2021 - 04:22 p. m.
    Te escapaste del entomólogo y por eso jamás aprendiste historia.
Carlos(23773)10 de julio de 2021 - 02:05 p. m.
Carakinita, hablas de libertad o libertinaje, no confunda a los lectores, sea más objetiva
  • Santiago(13232)10 de julio de 2021 - 11:52 p. m.
    Una de las primeras señales para detectar a un buen facho, a uno de esos ignorante y fanático ultarderechista es que recalca a cada paso la "diferencia" entre libertad y libertinaje..
Hernando(58851)10 de julio de 2021 - 01:54 p. m.
Ningún gobierno en Colombia se ha ocupado, ni preocupado, siquiera, por conocer la causa de la violencia, generalmente joven , que se observa, de manera frecuente, en distintos escenarios.
Julio(2346)10 de julio de 2021 - 01:49 p. m.
No es la riqueza ni el poderío militar ni la extensión de sus fronteras lo que hace grande a un país sino la cultura de sus habitantes. Y aunque la China ha perdido mucho de su ancestral cultura es indiscutible que su civilización le lleva milenios de ventaja a la bárbara "cultura" occidental. No es la patria la q' honra a sus habitantes sino éstos los q' construyen la patria según su ética social
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