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Los migrantes fantasma

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Catalina Uribe Rincón
25 de noviembre de 2023 - 02:05 a. m.
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El partido de eliminatoria de fútbol masculino entre Perú y Venezuela tuvo una cruel intervención: la policía migratoria de Perú se paró a la entrada del estadio a revisar documentos de los hinchas. Y antes de que alguien entre a decir que “están en todo su derecho”, insisto en que es cruel y discriminatorio perseguir a las personas por su nacionalidad. La idea de que los venezolanos son “ilegales”, “indeseados” y “criminales” se cuela en el discurso, junto con la idea, aún más poderosa, de que son “prescindibles” y “deportables”.

Después del partido, leí en un par de medios que las autoridades peruanas nunca encontraron a esos “migrantes ilegales”. Como afirmó el especialista en derecho internacional Alonso Gurmendi, la medida estuvo orientada a que los xenófobos aplaudieran, no a regular la migración. “El punto es que los vean diciendo que la comunidad que odian va a ser monitoreada, para que sientan que ya no tendrán que convivir con ella. Si se deporta a alguien no importa”, añadió en X. Esos migrantes que acechaban nunca llegaron o desaparecieron como fantasmas.

El año pasado en Estados Unidos varios medios denunciaron los “vuelos fantasma” de Biden. Estos vuelos, que han ocurrido también en los gobiernos de Bush, Obama y Trump, transportan a migrantes menores de edad que llegan sin compañía adulta hacia albergues en otras ciudades donde puedan ser acogidos. No es una política inusual ni tiene nada de secreto, pero las acusaciones de republicanos de que los niños llegan en vuelos “secretos” en medio de la noche le han hecho adquirir un aura de oscuridad y misterio.

Esta aura fantasmagórica es la que quiero resaltar, pues recoge la experiencia migrante. ¿La razón? Llegar a un país sin las garantías institucionales significa hacerse invisibles, hacerse notar lo menos posible para así pasar desapercibidos por las autoridades, la ley y los ciudadanos xenófobos. A varios migrantes les toca aceptar trabajos “invisibles”, donde nunca obtienen reconocimiento. En EE. UU., al español se le llama “kitchen language”, que es el que se habla atrás del restaurante, en las profundidades de la cocina, donde nadie mira, donde se lavan los platos y se saca la basura.

Ser migrante sin papeles es salirse de la vida civil y adentrarse a un mundo paralelo donde se cohabita en el mismo espacio, pero en otra dimensión; no en una criminal, sino en una precivil. Se trata de una suerte de estado de naturaleza que se reconoce por la manera como todo se nombra: “la bestia” es el tren de carga mexicano donde se esconden los migrantes, “los coyotes” son los conocedores de las rutas hacia el norte, “el pollero” es quien se dedica al tráfico de migrantes, “la perrera” son los centros donde se detiene a los migrantes. Las referencias son animales porque no hay ciudadanos sin ciudad que los acoja.

En este momento, son miles de personas que transitan por una ruta que desconocemos y se mueven sin que los veamos por las capitales. Hay quienes les temen a estos fantasmas, pero hay otros que, así no los vean, los cuidan. Las patronas, un grupo de mujeres mexicanas, desde hace muchos años sacan de sus limitados recursos para cocinar y lanzarles comida en bolsas a migrantes que pasan a toda velocidad en “los trenes de la muerte”. Estas samaritanas, como también se les conoce, quizás sean la reconfiguración de lo que significa la hospitalidad, una que no exija nombre, ni papeles, ni razones.

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Felipe(94028)25 de noviembre de 2023 - 07:45 p. m.
En el primer semestre del año llegaron casi 100.000 colombianos a España. De quién es la culpa ¿De España o de Colombia?. Este país de meirda expulsa a sus hijos, ya cansados de pobreza, violencia e inseguridad, corrupción, ausencia de trabajo y oportunidades. Los ricos se van a Miami y los pobres a donde los dejen entrar, pero la mitad del país pensando en largarse. El problema no es el rechazo en los países de destino, el problema es que Colombia rechaza y expulsa a los colombianos.
Fabio(53236)25 de noviembre de 2023 - 04:46 p. m.
soy ColomboAmericano, se del sello que llevamos los Colombianos en el exterior el narcotrafico, la prostitucion, crimen en general, en casi todos carceles del mundo hay Colombianos y miramos ahora a los Venezolanos como la causa de nuestros males
Jorge(30793)25 de noviembre de 2023 - 04:28 p. m.
Leo con regularidad a Catalina. Gran columnista que debe ser, ademas, es excelente excelente profesora.
Atenas(06773)25 de noviembre de 2023 - 03:26 p. m.
Ey, Cata, ¿cuántos venezolanos tienes acogidos en tu casa y con derecho a todo? Refiero una coincidencia q' me ocurrió en un viaje q' hice a Colombia: 1° fue en B/tá al abordar un taxi, durante la conversa con el conductor le pregunté x la inseguridad en su servicio y de una respondió "el mayor peligro son los venezolanos"; luego fue en Pereira, y en una ídem conversación lo mismo me respondió el taxista.¿Se pondrían de acuerdo?Y si no lo sabes, en USA o Canadá, es fundamental aprender el idioma
  • Hernan(97622)26 de noviembre de 2023 - 12:04 a. m.
    Atenas eres un idiota redomado, y pensar que hay cualquier cantidad que piesan igual...!
  • gustavo(92461)25 de noviembre de 2023 - 08:36 p. m.
    El cree que las babosadas que dice, sólo se le pueden ocurrir a cerebros privilegiados. Bobalicón de mierda...
  • Atenas(06773)25 de noviembre de 2023 - 03:26 p. m.
    Mientras me dan el crédito, comentario de Atenas
ANA(11609)25 de noviembre de 2023 - 02:59 p. m.
Gracias por visibilizar a los migrantes, señora Catalina. Nadie quiere dejar atrás su vida, su familia, sus posesiones, por pocas que sean, para correr al "mundo desconocido" que los rechaza y los maltrata. Las necesidades básicas insatisfechas, los obligan a salir . Es una verdadera vergüenza para los países que los rechazan, sin reconocer que alguna vez, sufrieron la misma orfandad. GRACIAS a todas esas mujeres que comparten con "esos desconocidos", lo poco que tienen. GRANDIOSAS.
  • Felipe(94028)25 de noviembre de 2023 - 07:36 p. m.
    La vergüenza mayor es es la de los países que los echan y que les niega posibilidadesdr vida. Más vergüenza la de Colombia que la de USA o España, que con el tiempo regularizan su situación y en donde pueden mejorar su vida o incluso enviar remesas para ayudar a sus familias.
  • Manuel(21794)25 de noviembre de 2023 - 03:16 p. m.
    Así es.
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