En días pasados hubo algunos debates con respecto a la relación entre los niños y la comunidad LGBTI como si se tratara de dos grupos completamente separados. Por un lado, YouTube se disculpó públicamente luego de recibir críticas por su algoritmo “modo restringido”. Muchos youtubers alegaron que todos los videos cuyos contenidos incluyen palabras como gay o lesbiana en su título o descripción son inmediatamente catalogados como temática de adultos y, por ende, censurados para los menores de edad.
Por otro lado, la nueva película de Disney, La Bella y la Bestia, generó polémica por la inclusión de un personaje gay. Algunos críticos del film argumentaron que la película debía ser vetada o sólo ser vista por adultos para “preservar la pureza infantil”. Pero, ¿en qué consiste la llamada pureza infantil? ¿Cómo se preserva entonces la pureza de los niños LGBTI? ¿Acaso prohibiéndoles contenido heterosexual? ¿A quién se le ocurrió que todo lo relacionado con LGBTI es tema de adultos?
Asumir que los temas LGBTI no involucran a los niños es problemático por muchas razones. No sólo parece asumirse que la orientación sexual es algo que surge de repente en la adultez, sino que se está privando a los niños diversos de identificarse con personajes y temas de la cultura popular. Continuar creyendo que debemos presentar a los niños un mundo alejado de toda experiencia personal no solamente es cruel sino psicológicamente dañino. Y las razones para hacerlo son aún más absurdas.
De hecho, esta censura tiene que ver en la mayoría de los casos con una asociación directa con el sexo, ese fantasma que todavía en el 2017 atormenta a muchos. Pero mientras superamos esta tara, hay que dejar de pensar que la “homosexualidad” es sólo sexo. Hay sexo, claro, como en la “heterosexualidad”. Pero tanto tabú daña el balance. La gente ve a una mujer embarazada y no piensa en sexo, aunque al pequeño no lo traiga precisamente la cigüeña. La gente ve a una mujer bella con una bestia y tampoco piensa en sexo (¡por fortuna!). Pero la mayoría de la gente ve una pareja homosexual y piensa en sexo, así esto solo sea una parte de una relación amorosa, muchas veces al mejor estilo de Disney.
