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Liderazgos latinoamericanos

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Catalina Velasco Campuzano
24 de febrero de 2025 - 05:05 a. m.
"En el ecosistema político colombiano se observan con atención e interés las figuras de Milei y Bukele, uno caótico y otro metódico, quienes sin duda han sido exitosos construyendo sus personajes políticos, tan diferentes en las formas y tan parecidos en el fondo" - Catalina Velasco
"En el ecosistema político colombiano se observan con atención e interés las figuras de Milei y Bukele, uno caótico y otro metódico, quienes sin duda han sido exitosos construyendo sus personajes políticos, tan diferentes en las formas y tan parecidos en el fondo" - Catalina Velasco
Foto: EFE - Juan Ignacio Roncoroni
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La semana pasada el presidente de Argentina promocionó la criptomoneda $Libra a través de sus redes sociales y en cuestión de horas las pérdidas de quienes creyeron que era una buena idea atender sus recomendaciones superaron los ochenta millones de dólares. La discusión política y judicial sobre este caso -que ya tiene alcance continental- tomará un buen tiempo, pero ante este hecho cierto hoy podemos decir que el gobierno libertario de Javier Milei tiene la economía argentina en problemas, y que sus actos como presidente favorecen intereses particulares; esos ochenta millones de dólares llegaron a algún bolsillo.

Desde hace un tiempo Javier Milei sobresale en el paisaje político latinoamericano, blandiendo la motosierra y gritando “zurdos de m…. “, con la promesa de romperlo todo -comenzando por el Estado y la política-. Se hizo presidente con el traje de chico malo, y ya veremos si su misión de salvar la economía por la vía dolorosa tiene algún resultado, pero no pinta bien por el impacto social de sus medidas que ya es inocultable, pero especialmente no pinta bien por la poca astucia que evidenció para esconder la mano invisible.

Menos estrambótico y quizá más efectivo ha sido Nayib Bukele en El Salvador. Su figura prolija -nunca una mala palabra ni una frase disonante, siempre bien vestido, siempre bien portado y con una familia ejemplar- exalta los valores conservadores latinoamericanos. Reelegido por mayoría, expone con orgullo su capacidad de garantizarle la seguridad a una sociedad acosada por las pandillas, pero lo que no cuenta es que se llevó por delante la justicia y los derechos humanos. Los detenidos en El Salvador se juzgan en colectivo: cientos de personas comparecen en simultánea y si hay pruebas contra uno, caen todos. En los buses intermunicipales, las requisas policiales incluyen la revisión de tatuajes a los hombres jóvenes.

En las cárceles salvadoreñas se hacen visitas guiadas a periodistas internacionales y se expone la forma como viven miles de personas, luces prendidas las veinticuatro horas, silencio sepulcral, la negación total de la humanidad. La verdad, si se compara esto con las condiciones materiales de las cárceles colombianas, no es fácil identificar qué es peor. La economía salvadoreña se mueve en buena parte gracias a las remesas que envían los migrantes a sus familias que dejaron en la patria, y ahora se promueven las cárceles como un nuevo producto de exportación que ya le ofrecieron a Estados Unidos como solución, por ejemplo, para los presos no estadounidenses que cuestan tanto.

En el ecosistema político colombiano se observan con atención e interés las figuras de Milei y Bukele, uno caótico y otro metódico, quienes sin duda han sido exitosos construyendo sus personajes políticos, tan diferentes en las formas y tan parecidos en el fondo. Sabemos que el amor entra por los ojos y el amor de los votantes radica en la simpatía que un político logre transmitir, pero me parece que les va a tocar esforzarse un poco más a quienes pretenden encarnar al Milei colombiano o al Bukele colombiano. En contraste, Claudia Sheinbaum crece todos los días.

Catalina Velasco Campuzano

Por Catalina Velasco Campuzano

Exministra de Vivienda, Ciudad y Territorio. Economista, especialista en derecho urbanístico, máster en políticas públicas y doctora en estudios políticos. Dedicada por más de 25 años a las políticas públicas y la gestión urbana.
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Pedro Juan Aristizábal Hoyos(86870)24 de febrero de 2025 - 10:50 p. m.
Buquele y Milei son indefendibles a este lo eligieron para organizar las cifras macroeconómicas y está empeorando todo: lo social y lo monetario. Y Buquele no es más que un chafarote como Maduro, sólo que más metodico
Juancho(17942)24 de febrero de 2025 - 08:08 p. m.
Bukele y su criptomoneda en El Salvador, un fracaso rotundo, quería que funcionara lo último en tecnología en un país de 60% de analfabetismo.
Heliodoro Velasco(58669)24 de febrero de 2025 - 05:49 p. m.
El drama de las cárceles es duro. Pero esos supuestos pillos sueltos el la ciudad..... Bogotá o Medellín,, terrible
Atenas (06773)24 de febrero de 2025 - 02:00 p. m.
La desfachatez de esta misera señora no tiene techo ni fecha en el calendario. Su ostentoso fracaso como MinVivienda y otras cositas más son un mentís ante cualquier análisis o comentario suyo sobre las gestiones de otros con mucha mayor responsabilidad, pues ella tampoco escapa al sabio aforismo q' reza "Si no puedes con lo tuyo, siendo de menor peso o tamaño q' lo de otro, mal podrías cualificar lo q' esencia te queda grande observar". Atenas.
  • Pedro Juan Aristizábal Hoyos(86870)24 de febrero de 2025 - 10:44 p. m.
    Este uribista sí es bien bobo. Respete mequetrefe. Asi le duela, la construcción está repuntando como ella lo había pronosticado, pero estos uribistas no aciertan ni una
DONALDO MENDOZA M.(67774)24 de febrero de 2025 - 11:26 a. m.
A quienes quisieran tener un Bukele en Colombia les conviene ver en el mapa el dpto. del Quindío, y consultar la población de Medellín. Eso es El Salvador. Eso, por si añoran cárceles...
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