Del Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural

En relación con la columna de opinión escrita por Armando Montenegro, titulada “Horribles Subsidios” y publicada en el diario El Espectador del 26 de septiembre de 2009, en mi calidad de Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural me veo obligado a precisar que este Programa se creó con el propósito de mejorar la competitividad y productividad del sector agropecuario, y fortalecer los ingresos de los productores.

Para lograr estos dos objetivos, desde el año 2007 se han venido implementando instrumentos de política tales como líneas especiales de crédito, incentivos a la inversión, a la asistencia técnica, a las coberturas, y apoyos económicos para la construcción de infraestructura de riego, la realización de investigaciones en ciencia y tecnología, etc., cuyos presupuestos han sido asignados a través de mecanismos de crédito o de la realización de convocatorias públicas, ciñéndose exclusivamente a los requisitos y reglas de juego definidos en la Ley 1133 de 2007. Gracias a este Programa, hasta la fecha ha sido posible beneficiar a más de 316.000 familias que viven del campo.

En el caso concreto de la asignación de subsidios para infraestructura de riego y drenaje (que como todo subsidio, incluyendo aquellos a las tasas de interés de créditos, son no reembolsables), las 4 convocatorias desarrolladas hasta el momento se han realizado a través de concursos públicos, abiertos y transparentes, con reglas claras y objetivas derivadas de la ley y la reglamentación vigente, conocidas previamente por las asociaciones de campesinos, los medios de comunicación, los organismos de control y toda la comunidad en general, y han sido operadas por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), el cual realiza los procesos de evaluación con profesionales externos e idóneos, quienes verifican el cumplimiento de los requisitos técnicos de las propuestas, en consideración de los proyectos y no de las familias o personas.

Una vez se ha determinado qué proyectos son declarados elegibles por razón del cumplimiento de los requerimientos técnicos, se les asigna una calificación de acuerdo a los criterios de carácter netamente objetivo, establecidos en los términos de referencia correspondientes a cada convocatoria. Después de una visita de verificación en campo y el otorgamiento por parte del beneficiario de las garantías de cumplimiento, pago de obligaciones laborales, estabilidad de la obra y calidad de los materiales, se procede a otorgar los respectivos apoyos económicos, los cuales son desembolsados a un encargo fiduciario constituido por el beneficiario, y cuya utilización sólo es posible con la firma del interventor externo contratado por el IICA, siempre que estén destinados a la ejecución del proyecto elegible.

Así las cosas, cualquier persona puede participar en la Convocatoria para acceder a los incentivos del Programa, siempre que su proyecto cumpla con los requisitos técnicos señalados en los términos de referencia (no como resultado de un juego de azar similar a la lotería), sin que pueda el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural establecer discriminaciones o restricciones que no estén contempladas en la ley, so pena de incurrir en responsabilidad penal, disciplinaria y fiscal.

Con el propósito de lograr un equilibrio entre generación de desarrollo económico y social, aumento de productividad y reducción de pobreza, dentro de la convocatoria de riego se han asignado presupuestos diferenciados para financiar distritos de riego (que benefician a pequeños productores de forma asociativa) y proyectos intraprediales (presentados tanto por personas naturales como por asociaciones de pequeños productores), asignando un mayor porcentaje a las iniciativas de pequeños campesinos (85% en 2008 y 87% en 2009), y premiando con una mayor asignación de puntaje a aquellos proyectos que beneficien a un mayor número de éstos. Gracias a este instrumento, a la fecha ha sido posible beneficiar 58.262 familias colombianas e irrigar 85.360 hectáreas, a través de la realización de una inversión total de $245.738 millones.

Vale la pena resaltar que la implementación de esta política pública ha sido acompañada durante los casi 3 años de ejecución, por la Contraloría General de la República, la cual ha ratificado el manejo transparente y objetivo de los recursos del Presupuesto General de la Nación apropiados para este propósito.

Adicionalmente, conscientes de la importancia que esta política pública tiene para el futuro del país, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural ha dispuesto la implementación de una evaluación de impacto, a través de la cual se determinen cuáles han sido los beneficios directos e indirectos que la población rural colombiana ha recibido con ocasión de la implementación de Agro Ingreso Seguro. De esta manera, desde el año 2007 se vincularon Fedesarrollo y Econometría Consultores S.A., organizaciones con reconocido prestigio nacional e internacional por su profesionalismo, transparencia y rigurosidad técnica, en la elaboraron de la línea base y en la definición de la metodología que se utilizará para realizar la primera medición en el año 2010, que permita determinar cómo el Programa ha impulsado el mejoramiento de la productividad, la competitividad, la generación de empleo y la reducción de la pobreza en el campo.

Espero haber explicado con suficiente claridad cuáles son los objetivos del Programa AIS y cómo opera la Convocatoria de Riego y Drenaje, de tal manera que la opinión pública no sea confundida con afirmaciones que no corresponden a la realidad.

 Andrés Darío Fernández Acosta.  Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural.

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