Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
La idea del presidente Uribe de conectarnos con Centroamérica por medio de la carretera del Darién, nos parece que es más un tema preelectoral que algo con mediana lógica.
Embarcarnos en un proyecto de esta magnitud, mientras la red vial del país es una de las más malas de Suramérica, es ya un despropósito. ¿Y qué decir de la destrucción del medio ambiente, cuando estamos hablando de ese tema como algo de vida o muerte para el planeta si seguimos depredando los recursos naturales?
Que no nos digan tonterías: apenas se abra la carretera, empezarán los aserraderos a acabar con todo, sin que el ministerio correspondiente haga mayor cosa. ¿O es que no vemos al Chocó, la Amazonia y los parques naturales arrasados por colonos necesitados, oportunistas y narcotraficantes?
Si el presidente Uribe continúa haciendo esos planteamientos , muchos de sus más fervientes partidarios reconsideraremos la posibilidad de reelegirlo.
Francisco Jiménez B. Medellín.
Sobre la moción de censura
He sido un ferviente admirador y defensor de algunas cosas realizadas por este gobierno, que parece querer perpetuarse en el poder. De igual forma, de algunos de sus colaboradores en el equipo de gobierno. Pero ya no tienen nombre las declaraciones hechas por Fernández una vez asegurado en su cargo: “Me encuentro satisfecho. Hoy le podemos confirmar al país que el programa Agro Ingreso Seguro es serio”.
No, esto ya es el colmo. Una falta de respeto contra el pueblo colombiano. ¿Cómo puede ser serio un programa en donde se barajan y se distribuyen setenta y dos mil millones de pesos entre apellidos de “ilustres” personajes, paracos, amigos del Gobierno y reinas de belleza? Gran parte de los ilustres congresistas demostraron una vez más que tienen su precio. Que siguen primando los beneficios personales, las ansias de poder y el mantenimiento de sus puestos. Imagino que para seguir estructurando y fortaleciendo este proyecto, tal como lo manifestó el Ministro, empezarán a buscar nuevos nombres y reinas de belleza, para repartir los dineros de los impuestos de todos los colombianos de bien, en busca de votos o de leyes que beneficien a unos pocos.
Quique Casasbuenas Iregui. Bogotá.
Envíe sus cartas a lector@elespectador.com
