Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.

O todos en la cama...

Columnistas elespectador.com

24 de noviembre de 2009 - 11:15 p. m.

Ocurre que en Bogotá decidimos que la gente debía dormirse a las 3 de la mañana.

PUBLICIDAD

Desde ese momento, bares, discotecas y clubes nocturnos cierran a esta hora. De lo contrario se ganan su sello por siete días puesto por la Policía, según la disposición del Alcalde Mayor, con la observancia permanente de la Secretaría de Gobierno.

Pues bien, parece que una suerte de doble moral se cierne sobre la ciudad y nadie parece percatarse. Más de un CAI tiene un letrero promocionando una fiesta que durará cuatro días seguidos con un anuncio que dice: “Bogotá no dormirá”, y cuyas entradas, que oscilan entre $150 mil y $480 mil, se pueden comprar por internet a través de una venta especializada de eventos masivos. Hasta acá no habría nada de raro de no ser porque la pachanga empieza a las 9:00 p.m., pero termina a las 6:00 a.m.

¿Esto por qué es posible si la fiesta es en la 200, o sea en Bogotá, y el decreto 013 del Alcalde rige para toda la ciudad? ¿Cómo puede pasar esto si por ser un evento masivo debe contar con el permiso de Gobierno? Los fondos de la fiesta son para una buena causa pues ayudarán a la fundación Corazón Verde, que se dedica a apoyar a viudas y huérfanos de policías. Sin embargo, y espero sinceramente que recauden muchos fondos por lo loable de su propósito, no está bien que las autoridades del Distrito y la Policía incentiven una fiesta que incumple las normas que se les ponen a todos. El fin no justifica los medios. Lo contrario, abre un boquete inmanejable para el futuro. Cada empresario que quiera pasarse de la hora sólo debe decir que de 3 de la madrugada en adelante los fondos son para una buena causa.

En el fondo el tema es un asunto comercial. La fiesta en cuestión usa como gancho el horario extendido que no puede ofrecer la rumba normal y legal del resto de la ciudad. Pero, ¿por qué es efectivo este gancho? Pues porque en Bogotá, nos guste o no, existe un mercado importante, puede ser más de 10.000 personas cada día del fin de semana, que rumbean o quisieran rumbear luego de las 3:00 a.m.

Read more!

Con esto además se configura una especie de competencia desleal. Justo en los primeros días de diciembre que la gente tiene más plata y por tanto puede acudir más a gastar en diversión. Por esto, cualquier empresario de la rumba podría, con toda razón, reclamar.

En conclusión, este hecho deja al descubierto que las autoridades en el fondo son conscientes de que lo mejor sería alargar la rumba y de que es posible hacer rumba controlada, como de seguro han pensado que será la fiesta de la fundación. No sigamos con la doble moral, acá hay un tema de libertades que no puede seguir siendo soslayado.

 Juan Sebastián Romero Leal. Bogotá.

Envíe sus cartas a lector@elespectador.com

Conoce más

Temas recomendados:

Ver todas las noticias
Read more!
Read more!
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.