El U.S. Open

Pasó el U.S. Open, el segundo ‘major’ del año y el nuevo campeón, el norirlandés Graeme McDowell con su buen temperamento y una paciencia envidiable, nos sorprendió a todos defendiéndose de un campo imponente como Pebble Beach, que no le permitió a ningún jugador terminar bajo par.

Ni siquiera al mismo Tiger Woods, que hace 10 años lo había dominado a su antojo y que esta vez, durante la segunda vuelta de la tercera ronda, nos ilusionó con algunas pinceladas de su mejor golf. Tampoco la pasó bien el colombiano Camilo Villegas, que terminó lejos de la punta pese a una gran segunda ronda que al menos le permitió superar el corte y recuperarse de un comienzo inesperado.

Pero la actividad del golf, lejos de detenerse allí, sigue girando por todo el mundo día tras día, y en esta ocasión llegó el turno una vez más de hablar del golf femenino, que este fin de semana celebra uno de sus cuatro ‘majors’ de la temporada actual: el LPGA Championship presentado por Wegmans. Es de especial atención este torneo para Colombia porque será la primera vez que tres jugadoras nuestras, la risaraldense María Isabel Baena, la santandereana María José Uribe y la vallecaucana Paola Moreno, intervengan en uno de los eventos más importante del golf femenino por el que han desfilado hacia la máxima gloria los nombres de Annika Sorenstam, Nancy López, y Louise Suggs, entre otras.

‘Marisa’, la mejor golfista femenina que ha tenido Colombia en su historia, aprovechará su último año de exención gracias al triunfo que obtuvo en el HSBC Match Play Championship del 2005, luego de retirarse de la competencia activa el año pasado. ‘Mariajo’, por su parte, intentará demostrar el nivel que la llevó a convertirse en jugadora con beneficios completos del LPGA Tour en el complicado Q-School del año pasado, mientras que Paola Moreno busca mantener su buen momento que le permitió triunfar en el Duramed Futures Tour, el circuito alterno del LPGA, a comienzos de este año.

El torneo, que comenzó a jugarse en 1955, se encuentra sin patrocinador principal por primera vez en 24 años de historia, luego que el año pasado, la cadena internacional de restaurantes McDonald’s no renovara el contrato que sostenía con el LPGA Tour desde 1994. Esta fue una de las crisis económicas más grandes del año pasado en el circuito femenino, que sobrevivió gracias a la unión de sus jugadoras y la renovación de algunas de sus directivas. De allí nació un esfuerzo mancomunado digno de admirar para mantener el torneo en pie, y ahora con el apoyo de la cadena de supermercados Wegmans, copatrocinador del evento, se repartirán un poco más de dos millones de dólares.

Y así como el LPGA Championship presentado por Wegmans estrena nombre y copatrocinador, también estará por primera vez en el Locust Hill Country Club de Pittsford, Nueva York, un par 72 de 6506 yardas de longitud en el que las mejores jugadoras del mundo pondrán a prueba su buen golf. Llegará como número 1 del mundo la japonesa Ai Miyazato, ganadora de 15 torneos en el LPGA Tour de Japón y que el fin de semana pasado tras su primera victoria en territorio estadounidense desbancó de la cima del golf mundial a la surcoreana Jiyai Shin, quien había heredado el trono de la mexicana Lorena Ochoa y reaparecerá este fin de semana con el ánimo de buscar revancha. También vale la pena fijar los ojos en la campeona defensora, la noruega Anna Nordqvist, quien se quedó con la corona el año pasado en apenas su quinto torneo como profesional. Lo mismo sucede con la estadounidense Paula Creamer, quien busca mantener la hegemonía que su país ha ostentado históricamente en este torneo ante el auge de las jugadoras asiáticas.