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Correr unidos hacia ninguna parte

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Fernando Araújo Vélez
09 de junio de 2024 - 02:10 a. m.
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Es un asunto de lógica: si estamos con los mismos personajes y conversamos sobre las mismas ideas, si nos rodeamos de quienes piensan parecido a nosotros y hablan casi siempre de los mismos temas, si solo leemos los escritos de aquellos que comulgan con nuestras ideas, y únicamente aceptamos las posturas que estén en la línea de nuestras propias posturas, no saldremos jamás de un radicalízado círculo vicioso que se hará cada vez más grande, más fuerte. Inmersos en nuestras apasionadas creencias y en tanta igualdad, nos convenceremos de que la unión hace la fuerza, y de paso, también, que de ella surgen la lógica, las verdades de lo que ha ocurrido y de lo que no, lo positivo y el futuro.

Contaminados por las redes, que cada vez nos dicen más lo que queremos oír y nada más que eso, y desinformados por los periódicos y los noticieros, que tratan los temas llevados casi siempre por un tráfico incendiario, surgido de estudiadas estrategias para indignar a la gente, hacerla tomar partido, volverla radical, envenenada y odiante, pues el odio suma clics, y los clics suman dinero, nos uniremos los verdes con los verdes, los rojos con los rojos, los amarillos y más amarillos, y los azules con los azules, y obviamente, cada vez seremos más azules, más amarillos, más rojos o más verdes, y veremos el mundo pintado solo del color que elegimos, que también es el color que queremos ver.

La unión hace la fuerza, con todas y cada una de las consecuencias que suele producir la fuerza y solo la fuerza. La unión hace la fuerza, y hace al fanatismo que lleva a la locura y ha llevado a tantas y tantas locuras en la historia de la humanidad.  La unión hace la fuerza, y también, la irracionalidad, la dependencia, la obsesión por hacer algo y cambiar el mundo y cambiarlo todo. Y hace el frenesí, la prisa, la inmediatez, el vértigo. Y hace la arenga desmedida, el panfleto, las exclusiones y todo tipo de divisiones. En aras de la unión-supuesta-solidaridad, corremos a ciegas hacia ninguna parte porque los demás, muy unidos y reunidos, corren a ciegas hacia ninguna parte.

Fernando Araújo Vélez

Por Fernando Araújo Vélez

De su paso por los diarios “La Prensa” y “El Tiempo”, El Espectador, del cual fue editor de Cultura y de El Magazín, y las revistas “Cromos” y “Calle 22”, aprendió a observar y a comprender lo que significan las letras para una sociedad y a inventar una forma distinta de difundirlas.fernando.araujo.velez@gmail.com
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Marce(d5vti)10 de junio de 2024 - 04:25 p. m.
Así es cada vez escuchamos y entendemos menos al otro, al que piensa difrerente y así vamos disgregando más a la sociedad que No Sabe para dónde ir.
alexandrs(m841l)10 de junio de 2024 - 02:50 p. m.
Existencialista, pero real. El fin es el mismo para todos.
jorge(3766)09 de junio de 2024 - 07:31 p. m.
Pa donde va Vicente..
Oscar(36876)09 de junio de 2024 - 05:57 p. m.
Espectacular Fernando, gracias.
CARLOS(lcggj)09 de junio de 2024 - 04:42 p. m.
Buena columna.
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