Era inevitable que la condena a Álvaro Uribe, quien ha sido uno de los protagonistas de nuestra política por casi tres décadas, sacudiera los cimientos de nuestro sistema político. Pero se trata de una terapia de choque necesaria.
Más allá de todo el alboroto, al veredicto de la valiente jueza Sandra Heredia se le ha hecho la casi única objeción de que estuvo políticamente motivado. Por desgracia para quienes sostienen aquella hipótesis, la contraevidencia es abrumadora. De hecho, como ya lo han señalado muchos, la trama que terminó con este desenlace fue puesta en movimiento por Uribe mismo cuando denunció al senador Iván Cepeda...
Conoce más
