La Sociedad de Mejoras y Ornato de Bogotá es la institución cívica más antigua de Colombia. Su historia cubre la friolera de 150 años. En los últimos tiempos la han presidido ciudadanas vitales, resueltas, como Elvira Cuervo o Elsa Koppel.
Y en estos años de ahora ha estado en el puente de mando el arquitecto Carlos Roberto Pombo. Lector de Edgar Morin y su Pensamiento Complejo, bogotano atado irreparablemente a su ciudad, hombre enfebrecido por la historia, la sociología, la demografía, entre otras ciencias que entremezcla para tratar de entender la que es quizás la creación más compleja de la humanidad: la ciudad contemporánea.
La búsqueda de la Sociedad de Mejoras en estos tiempos desconcertantes, es una y solo una: la civilidad. Y su savia vital, la que circula por sus alvéolos, la solidaridad. No queda de otra, o somos solidarios o esto se va al abismo. La conciencia de los demás. O como decía Saramago, entender que el “otro” soy yo mismo.
La solidaridad, como dijo Morin, es la única fuerza capaz de volver esta civilización al buen camino. Porque es una civilización descarriada, que se ha deshumanizado. Como ninguna otra cosa, la ciudad es el reflejo de los seres que somos. Y la SMOB lo sabe. Y reafirma que esa es su misión, su vocación histórica: crear civilidad. Y que es la llamada a convocar a los ciudadanos y congregarlos.
Pero para que la gente respete, tolere, ayude -o digámoslo de una vez, sin pudores-, para que la gente ame a los demás, y a su ciudad, es necesario que conozca su historia. La historia densa, orgánica, mutable permanentemente, de Bogotá. Eso, sin la menor duda, los ligará a Bogotá con mucha fuerza.
Por eso la Sociedad de Mejoras se ha embarcado en los últimos años en la construcción de una plataforma digital de proporciones colosales. Que contiene una línea del tiempo, desde que Jiménez de Quesada holló por primera vez esta tierra, hasta nuestros días. Todo estará allí, en cosa de unos meses. Las fuentes de agua, la historia y sus anales, la huella urbana, las ideas políticas, las instituciones, la evolución de la sociedad y la ciudadanía, el espacio público, las migraciones, la violencia, la expansión inmobiliaria, las guerras civiles, la iniciativa ciudadana, la evolución de los servicios públicos, los mapas y las cartografías, la movilidad desde la villa elemental de la Colonia…
En fin. Todo lo que siempre se ha buscado en diversos sitios, en diversos institutos, asociaciones e instituciones, aquí estará en uno solo. En esta plataforma interactiva que podrá usar todo el mundo, que servirá a académicos, estudiantes, escritores, ensayistas, políticos, consultores. Y claro, al ciudadano común y corriente, que quiere mirarse en el espejo del tiempo y entender quién es.
La SMOB tiene su sede en el espléndido Parque El Chicó, que es de todos nosotros, de todas las familias bogotanas, de los niños, de los novios, de los ancianos, de los deportistas. Es nuestro. Como el torrente de información útil y reveladora de esta plataforma digital que pronto será entregada al público.