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Harry Sasson presenta una receta en que el sabor de la espinaca y el dulzor de la leche de coco resaltan las mejores cualidades del queso campesino colombiano.
Uno de los tesoros de la gastronomía colombiana es el fresco, suave y blanquísimo queso campesino, un prodigio cuya elaboración por coagulación permite conservar todo el sabor de la leche de vaca. En efecto, una de las imágenes más inspiradoras del campo colombiano es un desayuno en medio del sembradío, con arepas, café humeante y el infaltable queso campesino, ideal para comenzar la jornada con la fuerza necesaria. Colombia sabe a papas, a café, a maíz, a frutas y a queso campesino. Precisamente por su suave sabor puede ser utilizado en otras preparaciones, con la seguridad de que no se hará notar demasiado sobre los demás ingredientes, como en la receta que propongo esta semana, con la que continuamos la serie de quesos. Verán, después de preparar estas espinacas al wok, que el queso campesino sirve para mucho más que para ponerlo sobre una arepa caliente y tostada (suena bien, ¿no?), y que en compañía de los ingredientes correctos podrá mostrar sus mejores cualidades.
Espinacas al wok con queso campesino y leche de coco
Ingredientes para 4 personas
800 gramos de queso campesino
1/2 cucharadita de ajo fresco finamente picado
1/2 cucharadita de jengibre finamente picado
1 kilo de espinaca fresca, lavada y sin tallos
1 taza de hojas de albahaca fresca
1 taza de leche de coco
2 cucharadas de mantequilla
1 cucharadita de curry
Sal
1 punta de azúcar
Salsa soya (opcional)
Preparación
Tenga listos y a la mano todos los ingredientes antes de comenzar a cocinar, pues el tiempo de cocción es muy corto. Recuerde siempre trabajar con el wok a la mayor temperatura posible, para lo cual puede dejarlo sobre el fogón a fuego alto un par de minutos antes de comenzar a cocinar. Cuando el wok alcance la temperatura adecuada vierta una cucharada de aceite vegetal y saltee rápidamente el ajo y el jengibre, y luego agregue las espinacas y el curry. Deje sofreír un poco antes de añadir la albahaca y la leche de coco. Cuando las hojas de espinaca estén dormidas y la leche de coco haya tomado consistencia integre la mantequilla y el queso campesino cortado en cuadros. Termine sazonando con sal, la punta de azúcar y salsa soya si lo desea.
