Un Tour muy caliente

Sigue a El Espectador en Discover: los temas que te gustan, directo y al instante.
Héctor Abad Faciolince
02 de julio de 2017 - 03:00 a. m.
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

Celebrar una victoria es mucho más fácil que anticiparla, y atreverse a vaticinar quién va a ganar el Tour de Francia, antes de que empiece, es casi un suicidio. No basta saber quiénes llegan más entrenados, con más ganas o menos cansados, con mejor o peor equipo. En las cosas del ciclismo, como en las de la vida, lo primero es tener las aptitudes y desarrollarlas preparándose bien, luego esforzarse, estar muy concentrado, no hacer trampa (la mayor tentación en el más duro de los deportes) y estar dispuesto a soportar sufrimientos indecibles sin desfallecer.

Pero a pesar de todo lo anterior, que se puede planear más o menos bien, de todos modos siempre intervendrá lo que León de Greiff llamaba “el ebrio azar, el ebrio azar, el ebrio azar”. Es decir, la suerte, lo que es incalculable, impredecible: pinchazos, motos atravesadas, espectadores locos, indigestiones, gripas, precipicios, caídas.

Los seres humanos siempre hemos querido conocer el futuro, calcularlo o tratar de adivinarlo. También yo quisiera saber quién va a ganar el Tour de Francia, aunque, si ya lo supiera, la carrera perdería para mí todo su interés. Este año, sin embargo, es especial para mí, porque voy con Caracol TV a seguir en directo algunas de las etapas más importantes de esta gran carrera. Por eso, me crean o no, el otro día estuve en el Oráculo de Delfos, que desde la Antigüedad tiene el prestigio de anunciar con exactitud el futuro. Cerré los ojos frente al templo de Apolo e hice la pregunta: “¿Quién va a ganar el Tour?”.

Parece mentira, pero, como a Maduro, me contestó un pajarito. Lo difícil con las pitonisas es saber interpretar lo que dicen. Creí entender que su trino decía esto: “Cultiva la independencia”. Con lo cual, quedé en las mismas. ¿Querrá decir que no me puedo dejar influir por nadie? Pero si no fue eso lo que pregunté. ¿O tal vez quiso decir que la etapa del 20 de julio, cuando se celebra nuestra Independencia, y es de montaña, va a ser fundamental? Quién quita; ojalá. Pero es mejor dejar a un lado las supersticiones y concentrarnos en lo que sabemos.

El Tour de este año, dicen los expertos, está mucho menos cantado, es decir, más abierto que nunca. Froome, el tricampeón, no mostró mucha fortaleza en el Dauphiné, y en una subida no muy larga el danés Jakob Fuglsang (que terminó ganando) y el australiano Richie Porte (segundo) le sacaron minuto y medio. Si esta prueba, que es como el prólogo del Tour, dice algo, Porte se ve más fuerte, pero en el Tour es fundamental tener un gran equipo, y Froome tendrá, entre otros, a nuestro gran Sergio Luis Henao (su mejor gregario), que acaba de ganar la París-Niza. Henao es tan bueno que podría ser líder en otros equipos, pero él deberá defender a Froome, incluso de sus propios paisanos colombianos.

Colombianos habrá bastantes, siete, y de todos los colores, como somos nosotros. Va a estar Esteban Chaves, que esconde su carácter fuerte en una dulce sonrisa; el incansable Rigoberto Urán, que este año se ve bien y corre tranquilo pues nadie apuesta por él; Darwin Atapuma, que apunta a ganar etapas; y sobre todo el insondable Nairo, a quien se le ha pedido algo que es casi imposible para otros: disputar dos grandes carreras por etapas consecutivas: el Giro y el Tour. Pinot, que también corrió el Giro y llegó cuarto, dice que si mucho tiene gasolina para disputar una etapa.

Veremos si el equipo de Nairo, Movistar, que conoce tan bien las dotes excepcionales del boyacense (el año pasado fue capaz de ganar la Vuelta después de correr el Tour), no está equivocado en su estrategia. Sería una dicha indescriptible que al fin un colombiano se coronara en la prueba reina del ciclismo. Aunque tal vez el oráculo haya querido decir que va a ganar alguien que nadie se espera o, por decirlo así, un independiente. ¿Un Contador, un Majka, un Meintjes? O quizá el que mejor aguante, solo, el calor en un Tour que, como confirmación del calentamiento global, se anuncia ardiente.

Conoce más

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscríbete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.