Publicidad

Los últimos en cerrar y los primeros en abrir

Sigue a El Espectador en Discover: los temas que te gustan, directo y al instante.
Isabel Segovia
21 de abril de 2021 - 03:00 a. m.
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

Finalmente, la ministra de Educación puso fecha a la apertura de colegios: entre abril y mayo el 100 % de las sedes educativas deberán estar abiertas y el 100 % de los estudiantes deberán asistir bajo el modelo de alternancia. Simultáneamente, la alcaldesa de Bogotá informó a la ciudadanía que la prioridad ahora será mantener los colegios abiertos y por esta razón los demás sectores serán quienes asuman los cierres para enfrentar el tercer pico de la pandemia.

Desafortunadamente, el daño está hecho, pero poner plazo a las aperturas y dar prioridad al proceso educativo de los niños y de los jóvenes evitará que lo sigamos agudizando. Hoy, cuando algunas regiones padecen un tercer pico de contagios, es muy importante tener presente que los colegios deben ser los últimos en cerrar, como lo está haciendo Bogotá; que el pico no es uniforme en todo el país y las decisiones sobre los cierres deben tomarse según la realidad de cada municipio, siguiendo los lineamientos establecidos por el Ministerio de Salud y contando con su autorización, como lo hace ahora magistralmente Antioquia; y que si toca cerrarlos, deben estar listos para una apertura inmediata una vez las condiciones epidemiológicas lo permitan, porque tendrán que ser los primeros en abrir.

Además de haber privado a la mayoría de la población en edad escolar del derecho a la educación, la recreación y la socialización, hemos satanizado los colegios y a los niños. No logramos superar el miedo a la relación que tienen estos espacios y los estudiantes en la propagación del virus, aunque la evidencia demostró, desde hace más de un año, que los niños no son grandes vectores y se contagian menos, y que el nivel de contagio en el colegio es el mismo que el de la comunidad donde se encuentra (en algunos casos incluso son entornos más seguros). El mejor ejemplo es la reciente declaración del alcalde de Medellín en la que lista, de manera descontextualizada, una a una las edades y las condiciones médicas de aquellos menores de edad en estado crítico de salud debido a la pandemia. Obviamente la vida de cualquier ser humano en riesgo genera una pena enorme y cuando se trata de un menor de edad, peor, pero utilizar esta situación para generar temor en la ciudadanía no sólo es irresponsable sino mezquino e irrespetuoso con quienes han vivido de cerca esa terrible realidad.

Las instituciones educativas, como todos los espacios que habitamos y utilizamos día a día, no están exentas de riesgo. Sin embargo, sabemos cómo podemos mitigarlo y conocemos los protocolos a seguir cuando se producen contagios. Los niños y los jóvenes no pueden seguir siendo los responsables de resguardar a los adultos que los rodean; todo lo contrario, quienes debemos protegerlos y velar por sus derechos somos justamente los mayores.

Posdata. El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar sigue sin cumplir su función. De las más de 65.000 unidades de servicio de atención a menores entre cero y cinco años, sólo 1.000 se encuentran abiertas. Adicionalmente, mantiene inexplicables restricciones, como la imposibilidad de atender presencialmente a los menores de dos años y obligarlos a usar tapabocas, cuando de manera reiterada la OMS ha declarado que utilizarlos en estas edades es más dañino que no hacerlo. Otra tragedia silenciosa que como sociedad nos costará años enmendar.

Conoce más

 

wilson(72314)21 de abril de 2021 - 07:00 p. m.
La señora Isabel Segovia debe ser de las que piensan que alemanes, franceses, italianos, españoles y un etcétera de países medianamente responsables con sus ciudadanos están locos y son una partida de vagos que no quieren trabajar; la realidad es contra evidente con lo que usted quiere mostrar...es risible que hable de socialización con niños enmascarados y sin posibilidad de contacto entre ellos.
Atenas(06773)21 de abril de 2021 - 04:13 p. m.
Ay, Chaba, enarbole esta misma bandera de la presencialidad escolar en lo pertinente a las actividades comerciales, e igual confirmará cómo se estranguló la recuperación económica del país. Y con todas sus fatídicas consecuencias sobre el empleo e informalidad.
Alvaro(50403)21 de abril de 2021 - 03:55 p. m.
Abrir urgente las guarderías los niños la necesitan
  • María(60274)21 de abril de 2021 - 07:43 p. m.
    Álvaro estamos en guerra si no te has dado cuenta y en una guerra lo primero es salvar la vida, después habrá tiempo para lo demás.
JavierM(7331)21 de abril de 2021 - 03:23 p. m.
Tantos indignados por mandar al Colegio a los niños, pero les importa un carajo ir con esos niños a centros comerciales sin aireación y a fiestas infantiles. Los papás lo que se deben preguntar es si ellos se están cuidando en el trabajo. Los adultos son los vectores del covid. No los niños. En esto estoy con Isabel. La evidencia científica es clara.
  • María(60274)22 de abril de 2021 - 12:43 a. m.
    Javier, el virus es el que manda, el que dicta las normas y si uno quiere sobrevivir las tiene que seguir.
  • JavierM(7331)21 de abril de 2021 - 03:25 p. m.
    Y como veo que este chat está lleno de descalificaciones ad hominem culas, aclaro. Si, tengo 2 hijos privilegiados que están en presencialidad desde el año pasado.
Adriana(87955)21 de abril de 2021 - 02:02 p. m.
Esta Chava no oculta el desespero para que la comunidad estudiantil se contagie en la pandemia. Un hijo no se reemplaza con lamentaciones. Solterona.
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.